Combatir la exclusión con el abrazo del campo
La Caixa premia la capacidad de «transformación social» de diez entidades con proyectos dirigidos a fomentar la inserción de personas que se encuentran en situación de vulnerabilidad
No parten de la misma realidad que el resto de la población. Son personas con alto riesgo de exclusión social -algunos proceden de entornos desfavorecidos y otros padecen algún tipo de discapacidad (física o psíquica) y sus circunstancias personales les alejan del mercado laboral. La Obra Social La Caixa ha premiado este año diez proyectos dirigidos a brindar a estas personas la oportunidad de superar estas barreras y conseguir un trabajo con normalidad.
Los galardones, dotados con 15.000 euros cada uno -también hay cuatro accésits de 5.000 euros-, reconocen, según La Caixa, «la vocación de transformación social, real y directa, a través de métodos innovadores, con el objetivo de mejorar la calidad de vida de las personas en situación o riesgo de vulnerabilidad». Este año los premios recaen sobre entidades que desarrollan su labor cooperativa y solidaria en Barcelona, Madrid, Murcia, Málaga, Sevilla, A Coruña, Lugo Segovia, Vizcaya y Lleida y de ellos se beneficiarán 14.921 personas.
Recuperar parcelas
Entre las iniciativas premiadas se encuentra «Desos Opción Solidaria, Cooperació y Desarrollo Sostenible» de Barcelona, destinada a facilitar la inserción social y laboral de estas personas a través de la recuperación de parcelas abandonadas o en desuso del Parque Agrícola del Baix Llobregat (Barcelona). «Lo innnovador del proyecto es que combatimos la exclusión abrazando el campo, trabajándolo desde una perspectiva ecológica, desde el respeto», señala en declaraciones a ABC Rebeca Segura Alonso, coordinadora del proyecto.
La iniciativa, que se realiza en colaboración con el Ayuntamiento de Sant Boi de Llobregat y la Cooperativa Central Parc del Baix Llobregat, que nació con el doble objetivo de recuperar esta zona agrícola para dar respuesta a la creciente demanda de productos de proximidad, consta de una parte de formación en la que se imparten cursos a estas personas, y una segunda etapa de prácticas sobre el terreno. Desde que se puso en marcha el proyecto, en abril de 2015, pasan anualmente por él cerca de 16 personas, apunta Segura, quien distingue entre tres perfiles de usuarios: un primer grupo de jóvenes, de edades comprendidas entre los 16 y 21 años, que no han acabado la Educación Secundaria Obligatoria (ESO) y tienen complicado reemprender los estudios y también acceder al mercado laboral; un segundo grupo de parados de larga duración, y, por último, un tercer grupo en el que se encuentran algunos refugiados.
Los integrantes del primer grupo asisten en una primera parte a c ursos de formación en los que se les forma sobre agricultura ecológica y en una segunda etapa trabajan las tierras de la cooperativa, siete hectáreas en las que se cosechan productos de temporada como alcachofas, calabacines, coles... En los dos otros grupos, se establecen estrategias formativas adaptadas a sus peculiaridades. «Es muy gratificante ver la respuesta de estas personas», dice Rebeca y recuerda especialmente la «cara de ilusión» que vio en un refugiado sirio cuando le propusieron participar en el proyecto.
«Nunca olvidaré su cara»
«Nunca olvidaré su cara de ilusión», dice la coordinadora del proyecto. En la categoría de accésit, La Caixa ha reconocido también, entre otras, la labor de «El Forn de les Obagues i Talma», una iniciativa enrraizada en la comarca de Les Garrigues (Lérida) destinada a combatir la exclusión formando y proporcionando un trabajo en el sector panadero a estas personas.
El proyecto, que arrancará en octubre, cuenta con el apoyo del Ecocentro Les Obagues de Juneda, una cooperativa de trabajo y formativa orientada a conectar a estas personas con el entorno rural de la zona. «El objetivo final es la inserción en el mercado laboral ordinario de estas personas a través de la formación que les damos como panaderos », precisa Mariona Serós, coordinadora de la iniciativa. «Es importante que tengan una oportunidad en su entorno más cercano», concluye. El acto de entrega de los premios se celebró ayer en Barcelona, y lo presidieron la ministra de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Dolors Montserrat; el director general de la Fundación Bancaria La Caixa, Jaume Giró, y el subdirector de la Fundación Bancaria La Caixa, Marc Simón.
«Sois milagros»
«Llegáis a dónde las administraciones no llegan. Sois milagros», dijo la ministra refiriéndose a los premiados. Por su parte, Giró felicitó a todas las entidades que se presentaron por arriesgarse a hacer cosas distintas.
« No podemos abordar los nuevos retos con las viejas soluciones », subrayó el directivo. En total, formalizaron candidatura a los premios 643 proyectos de los 3.229 presentados a las seis convocatorias 2017 del Programa de Ayudas a Proyectos de Iniciativas Sociales que La Caixa impulsa anualmente.