Los coches de diésel y gasolina estarán prohibidos en Reino Unido a partir del 2035
Boris Johnson adelanta la descarbonización del parque móvil y anuncia la neutralidad en carbono en 2050
Quedan solo quince años para que los coches de diésel y gasolina sean vetados en el Reino Unido, cinco años antes del calendario propuesto originalmente no solo por los británicos, sino también por otros países como España y Francia y cuyo objetivo es combatir el cambio climático. El primer ministro Boris Johnson anunció además el compromiso de su país de lograr las «cero emisiones» en el 2050 durante el lanzamiento de la Conferencia sobre el Cambio Climático (COP26) que se celebrará en Glasgow, Escocia, en noviembre de este año.
Según la organización medioambiental Transport and Environment (Transporte y medio ambiente), que felicitó al Gobierno por la medida, la prohibición se pondrá en marcha, «si es posible», incluso antes del 2035 y además el veto incluye los vehículos con motores híbridos. Greg Archer, director del Reino Unido de Transport and Enviroment, declaró en un comunicado que «el gobierno ahora debe implementar de forma rápida las regulaciones necesarias», además de «exigir a los fabricantes que vendan un número creciente de automóviles con cero emisiones cada año hasta que se complete la eliminación». Además, señaló que las «reglas claras, con sanciones disuasorias para las compañías automotrices, son la mejor manera de asegurar que se alcance el objetivo».
La organización prevé que las ventas de automóviles eléctricos en el Reino Unido se dupliquen este año hasta superar el 3%, gracias al impulso de regulaciones sobre las emisiones de CO2 de los automóviles nuevos, así como a la carga impositiva a los contaminantes; y pronostican que para finales del 2021 las ventas lleguen al 7%.
“Creo que todos sabemos que como país y como sociedad, como planeta, como especie, ahora debemos actuar” , dijo Johnson durante su discurso, en el que afirmó que “el fenómeno del calentamiento global está pasando factura a las poblaciones más vulnerables de todo el planeta” razón por la cual el Reino Unido se ha comprometido a invertir “11,6 mil millones de libras esterlinas (13,7 millones de euros) para abordar el cambio climático global y financiar iniciativas climáticas en todo el mundo”. El premier aprovechó para señalar los logros británicos, como ser “la primera gran economía en hacer el compromiso” de emisiones cero en 2050 o que “uno de cada cinco vehículos eléctricos vendidos en Europa está construido en las orillas del río Wear”, en el condado de Durham.
En el Reino Unido, los automóviles son la causa de más del 60% de las emisiones de CO2 en medios de transporte.