Un centro de reeducación de menores proyectado junto a un colegio femenino revoluciona Huelva

La próxima construcción de un centro de guarda, reeducación e inserción de menores en la localidad de Aljaraque , a pocos kilómetros de la ciudad de Huelva, ha puesto en pie de guerra a este municipio de unos 20.000 habitantes. El problema no es el centro en sí, puesto que la provincia de Huelva no cuenta con ninguno de estas características, sino la ubicación concreta en la que está prevista su construcción: colindante con un colegio femenino del Opus Dei y a pocos metros de una guardería y un centro geriátrico.

Desde que los padres y vecinos de la urbanización La Dehesa, en el término municipal de Aljaraque, descubrieron que se proyectaba construir este centro de menores en el lugar que ahora ocupa un complejo de celebraciones conocido como El Paraíso, las protestas han sido constantes y sonadas tanto en la diputación de Huelva como en el propio ayuntamiento de Aljaraque. Se da además la circunstancia de que el centro de celebraciones, ahora embargado, fue propiedad del alcalde socialista de Punta Umbría, imputado en el escándalo de las ayudas a la formación.

«Es surrealista», afirma David, uno de los padres afectados por la decisión de la Junta de Andalucía. «¿Cómo se puede pretender abrir un centro en el que cumplirán su internamiento los menores condenados por cometer delitos graves, y hablamos incluso de delitos sexuales y de sangre, pared con pared con un colegio de niñas , y a pocos metros de una guardería infantil y un a residencia de mayores? No tiene sentido», lamenta este padre.

Los afectados ya han enviado una carta al Defensor del Pueblo andaluz manifestando su «extrema preocupación» por la inadecuada ubicación del centro de menores. Los vecinos de Aljaraque se han organizado en la Plataforma para la Reubicación del Centro de Internamiento de Menores, que aglutina a diferentes asociaciones de padres, vecinos y comerciantes de los núcleos urbanos de La Dehesa, Bellavista, Corrales y Aljaraque, y han iniciado una campaña de recogida de firmas.

Hasta el momento, las autoridades no les han escuchado. Y no porque no se hayan hecho oír en los plenos de la diputación de Huelva y del ayuntamiento de Aljaraque en los que han irrumpido al no ser atendidos, ni admitidas las propuestas de modificación del orden del día de carácter urgente que presentaron. Las declaraciones del delegado del Gobierno de la Junta, Francisco José Romero, afirmando que «no habría marcha atrás», avivaron aún más la indignación de los vecinos de Aljaraque , que aseguraron a través de un comunicado en Facebook que pelearán «hasta la última gota de sangre para evitar que ese centro se instale en Aljaraque».