Se cayó del caballo y su mandíbula quedó colgada por un fino trozo de piel
Tras una operación de cinco horas y media, Emily Eccles, de 15 años, ha recuperado la sonrisa
Su sonrisa está llena de felicidad y agradecimiento a quien ha hecho posible que pueda lucirla. Es la historia de Emily Eccles , una joven de 15 años que sufrió una caída terrible de su caballo que la dejó al borde de la muerte y con la mandíbula inferior izquierda prácticamente desprendida , solo sujeta por una finísima tira de piel. La habilidad de un cirujano logró solucionarlo, y ahora su historia da la vuelta al mundo, informa «The Times».
Lo último que esta joven recuerda es una gran mancha roja mientras su cuerpo volaba tras caer del caballo, lo que no imaginaba es que era su mandíbula . Justo después del accidente, se le realizó una exploración en 3D del cráneo, en la que se mostraban a la perfección las secuelas del accidente. Sin embargo, en una operación que duró cinco horas y media , el cirujano Ricardo Mohammed-Ali, del Hospital de Niños de Sheffield, logró recontruirle la mandíbula y le aseguró que pronto sus cicatrices pasarán prácticamente inadvertidas.
Ahora, la adolescente se ha dirigido por escrito al Palacio de Buckingham para pedir que se conceda algún mérito al cirujano , por la manera en la que transforma de sus pacientes, pese a que Mohammed-Ali, después de que los padres de Emily le dieran las gracias por lo que hizo, dijo que solo estaba haciendo su trabajo.
La madre de Emily, Michelle, de 50 años, contó que tanto ella como su marido, Chris, de 48 años, vieron la escena del accidente . «Hemos tratado de borrar esa imagen de nuestras mentes», aseguró.
La adolescente contó a «The Times» que su drama comenzó cuando estaba de viaje con un amigo y su familia en agosto . El tubo de escape de un coche que estaba cerca explotó, lo que provocó un fuerte susto para el caballo que montaba, que comenzó a correr descontrolado, hasta que la joven se golpeó en la madíbula con una puerta y cayó al suelo.
Mohammed-Ali dijo que la de Emily había sido una de las peores lesiones faciales que había encontrado a lo largo de su carrera. «Podría haber sido peor, pero es una de las lesiones más importantes que he visto en un niño fuera de las zonas de conflicto», dijo. «La lesión de Emily fue significativa porque todo el lado izquierdo de la mandíbula inferior, desde la parte frontal de la mandíbula hasta la articulación, se separó de la cara y solo se retuvo con una pequeña tira de piel».
El cirujado añadió que se encontaba «muy satisfecho» por la operación que había realizado, y aseguró que las cicatrices serán prácticamente invisibles dentro de un año.
Además, la joven ya ha podido volver al instituto, donde asegura que ha recibido todo el apoyo y cariño de sus compañeros, que se han interesado en todo momento por ella. Aunque aún no ha convencido a sus padres, Emily asegura que quiere volver a montar a caballo.
