Boris Johnson anunciará el lunes nuevas restricciones para contener el virus

En medio de críticas a su gestión, el primer ministro pondrá en marcha un nuevo sistema de tres niveles, tipo semáforo, con el que pretende evaluar el nivel de riesgo de contagio en diferentes zonas del país

El primer ministro Boris Johnson sale de Downing Street EP
Ivannia Salazar

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El próximo lunes, Boris Johnson anunciará en el parlamento una serie de nuevas restricciones cuyo objetivo es contener la propagación del Covid-19, previsiblemente en varias circunscripciones del norte de Inglaterra y en las Midlands. Se espera que el primer ministro aproveche su intervención para desvelar la puesta en marcha de un nuevo sistema de tres niveles, tipo semáforo, con el que el gobierno pretende evaluar el nivel de riesgo de contagio en diferentes zonas del país. El cierre temporal de pubs y restaurantes podrían estar entre las medidas, ya que la obligatoriedad actual de cerrar las puertas a las diez de la noche no parece ser suficiente.

Las nuevas restricciones entrarán en vigencia solo horas después del anuncio, según confirmaron fuentes de Downing Street, en línea con lo expresado por el principal asesor estratégico del primer ministro, Edward Lister, quien dijo que es "muy probable" que ciertas áreas enfrenten "más restricciones" debido a una "incidencia creciente" de Covid-19 . En una carta dirigida a los parlamentarios, Lister afirmó que el gobierno está en medio de la toma de "decisiones difíciles" con los líderes locales, que son los encargados de "ayudar a dar forma al paquete de medidas".

El Ejecutivo, que también estaría considerando restringir la movilidad, evitando así que las personas ingresen y salgan de las áreas más afectadas, ha sido sin embargo criticado por las autoridades de regiones como West Yorkshire, que aseguran estar "preocupadas por los rumores" de que podrían ser obligados a cumplir con “nuevas y duras medidas sin ninguna discusión o consulta”. Una fuente del gobierno aseveró a la BBC que “como la población local tendrá que soportar estas restricciones, lo correcto es que sus líderes tengan voz y voto”.

“Seguimos sin estar convencidos de que imponer nuevas restricciones que impliquen el cierre de empresas sea la forma más eficaz de combatir el virus, especialmente cuando está en juego la salud de nuestra economía, los empleos y los medios de vida de las personas”, dijeron en una carta conjunta los líderes de los consejos de West Yorkshire enviada a los ministros de finanzas, salud y vivienda, en la que advirtieron de que otro cierre tendría un efecto "devastador" en la economía regional y “deshará el buen trabajo que hemos hecho durante la última década”. Nottingham, que tiene actualmente la tasa de infección por coronavirus más alta de Inglaterra, con 760,6 casos por cada 100.000 personas, solo tenía 158,3 el 29 de septiembre, lo que ejemplifica lo que sugieren las cifras oficiales: que los casos en el norte están aumentando dos veces más rápido que en el resto del país. Liverpool, con 600 casos por cada 100.000 habitantes, será otra de las ciudades sometidas a los nuevos cierres.

Las restricciones locales son la apuesta de Johnson, que no es partidario de un confinamiento generalizado como el decretado en primavera, para contener el brote. Sin embargo, ahora mismo enfrenta críticas tanto de la oposición como de sus propias filas por la gestión de la pandemia, al tiempo que su popularidad entre la población sigue cayendo. En un intento por atajar la crisis económica que se suma a la sanitaria, el ministro de Finanzas, Rishi Sunak anunció que el gobierno pagará dos tercios de los salarios de los trabajadores durante seis meses si las restricciones obligan a las empresas a cerrar, decisión que muchos consideran insuficiente. Entre ellos los alcaldes de Liverpool, Steve Rotherham; Manchester, Andy Burnham; Newcastle, Jamie Driscoll; y Sheffield, Jan Jarvis, que en una rueda de prensa conjunta calificaron ayer el plan como “insuficiente” y señalaron que afectará a los peor pagados y quienes no tienen un salario mínimo digno. "Estas personas no pueden elegir pagar dos tercios de su alquiler o dos tercios de sus facturas”, advirtieron.

Mientras tanto, los hospitales se están preparando para lo peor ante el repunte de casos. Por ejemplo, de las 400 camas para pacientes con Covid-19 que hay en Liverpool, 241 ya estaban ocupadas el jueves.

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