Baleares decide no obligar a llevar mascarilla en los paseos marítimos si hay distancia social
El Gobierno regional ha optado finalmente por contemplar más excepciones de las inicialmente previstas en el uso de ese elemento de protección
Últimas noticias del coronavirus y los rebrotes en España en directo

El Gobierno balear aprobó ayer una resolución que pretende reforzar las medidas dirigidas a prevenir la propagación del Covid-19, entre las que se incluye la obligación de llevar mascarilla también en la vía pública a partir de ahora. Esta medida había sido ya anunciada la pasada semana por el Ejecutivo que preside la socialista Francina Armengol, si bien el texto aprobado finalmente ahora contempla más excepciones de las inicialmente previstas por el Govern a la hora de eximir del uso de la mascarilla. Así, no será necesario, por ejemplo, llevarla en los paseos marítimos si hay distancia social.
La consejera autonómica de Salud , Patricia Gómez, había avanzado el pasado jueves que el uso de la mascarilla pasaría a ser obligatorio incluso cuando se respetase la distancia social. En principio parecía que sólo quedarían exentas de esa obligatoriedad zonas como playas y piscinas o situaciones concretas como llevar a cabo prácticas deportivas o tocar instrumentos de viento. Sin embargo, Gómez desveló ayer que tampoco será necesario llevar mascarilla en otros casos, como por ejemplo al consumir alimentos en bares y restaurantes, al pasear por la naturaleza o al encontrarse en los paseos marítimos o en los centros de trabajo, siempre y cuando se pueda mantener la distancia de seguridad de un metro y medio en esos dos últimos supuestos.
Cabe recordar que en el marco de las iniciativas impulsadas por el Govern para intentar frenar posibles nuevos brotes del coronavirus , Armengol había aprobado ya el pasado viernes el decreto ley 11/2020, de 10 de julio, por el que se establece el régimen sancionador específico para hacer frente a los incumplimientos de las disposiciones estatales y autonómicas dictadas para paliar los efectos de la crisis ocasionada por el Covid-19. El decreto establece sanciones de hasta 600.000 euros para las infracciones más graves, como por ejemplo la comercialización de fiestas ilegales.
Con anterioridad a la aprobación del citado decreto, el Gobierno balear había aprobado ya el pasado 19 de junio, como actuación inicial, el plan autonómico que recogía las medidas de seguridad por el coronavirus que deberían aplicarse en todos los ámbitos del Archipiélago a lo largo de los próximos meses. Dicho plan fijaba, entre otras medidas, diversas restricciones para los locales de ocio nocturno, como por ejemplo la obligatoriedad de cerrar a las dos de la madrugada o la prohibición de poder bailar en el interior de las discotecas. Así pues, a lo largo del último mes el Ejecutivo regional ha aprobado un plan de prevención del Covid-19 , un decreto ley que establece sanciones económicas para los incumplidores y una resolución que determina en qué situaciones se deberá usar la mascarilla.
Sanciones previstas
Todas esas disposiciones legales no están teniendo por ahora, sin embargo, el efecto disuasorio previsto. Así, en dos de las zonas turísticas más importantes de Mallorca, Magaluf y la Playa de Palma, se sucedieron a lo largo del pasado fin de semana imágenes de aglomeraciones de visitantes sin mascarilla y sin mantener la distancia de seguridad. A ello habría que sumar la celebración de botellones por parte de residentes en varios puntos de la capital balear.
Precisamente, distintos medios de comunicación y representantes políticos germanos se han hecho ya eco de forma crítica de las situaciones vividas en la Playa de Palma, que es una zona frecuentada sobre todo por turistas alemanes. En la zona de Magaluf, en cambio, la mayoría de visitantes suelen ser de nacionalidad británica. En ese contexto de preocupación por las posibles consecuencias sanitarias del reiterado incumplimiento de las medidas de seguridad existentes, el principal objetivo del decreto ley aprobado el viernes por el Govern es establecer medidas unificadas y coordinadas que permitan agilizar la tramitación y resolución de los procedimientos sancionadores.
Cabe recordar que las infracciones consideradas leves en el marco del mencionado decreto ley serán sancionadas con multas de entre 100 y 3.000 euros. En ese apartado se encuentra, por ejemplo, el incumplimiento de la obligación de usar mascarilla , que será sancionado con hasta 100 euros. En relación a esa circunstancia, la consejera de Salud explicó ayer en su comparecencia ante los medios que esa penalización específica se empezará a aplicar, en principio, a partir del próximo 20 de julio.
Por lo que respecta a las faltas graves recogidas en el mencionado decreto, serán sancionadas con multas de entre 3.001 y 60.000 euros. El Gobierno balear considerará como tales, por ejemplo, participar en fiestas u otros eventos de carácter privado, en espacios privados, en los que se produzcan aglomeraciones. En cuanto a las infracciones calificadas como muy graves, podrán ser objeto de multas que oscilarán entre los 60.001 y los 600.000 euros. Como se ha indicado ya, se situarán en esa categoría las comercializaciones de fiestas ilegales y las actuaciones que pongan en riesgo la salud pública.