Biodiversidad
En el Atlántico europeo viven más de 1,5 millones de ballenas, delfines y marsopas
En aguas españolas del Cantábrico y Galicia se han realizado más de 800 avistamientos de ocho especies de cetáceos distintas
Durante seis semanas del verano pasado, tres buques y siete avionetas muestrearon simultáneamente el Atlántico europeo, desde el estrecho de Gibraltar hasta Noruega , para conocer la abundancia y distribución de cetáceos en sus aguas. Los primeros resultados de esta campaña, denominada SCANS-III, estiman la presencia de más de 1,5 millones de ballenas, delfines y marsopas en las aguas del Atlántico europeo, según los datos dados a conocer en la conferencia de la Sociedad Europea de Cetáceos (ECS).
Las especies más abundantes son el delfín común (468.000), la marsopa (467.000) y el delfín listado (372.000) , con un total adicional de 158.000 delfines comunes o listados sin identificar. El número de individuos de otras especies de delfines fue de 28.000 delfines mulares, 36.000 delfines de hocico blanco y 16.000 delfines de flancos blancos.
También se estimó la abundancia de otras especies capaces de realizar inmersiones a grandes profundidades para buscar sus presas, principalmente cefalópodos, tales como calderones (26.000), cachalotes (14.000) y zifios de varias especies (11.000). Además de unos 18.000 rorcuales comunes y 15.000 rorcuales aliblancos.
En esta investigación han participado instituciones de nueve países europeos, entre ellos el Instituto Español de Oceanografía (IEO), que con el apoyo de tres barcos y siete avionetas muestrearon un área de 1,8 millones de kilómetros cuadrados y más de 60.000 kilómetros lineales desde el estrecho de Gibraltar hasta Noruega. Varios equipos internacionales de observadores registraron miles de grupos de cetáceos de 19 especies diferentes.
Investigadores del IEO, a bordo del buque oceanográfico Ángeles Alvariño, se encargaron de los muestreos en aguas españolas del Cantábrico y Galicia. En las aguas oceánicas del golfo de Vizcaya y del oeste de la plataforma gallega , se realizaron más de 800 avistamientos de ocho especies de cetáceos distintas, aunque aún será necesario llevar a cabo al menos una campaña más en el futuro antes de que se pueda evaluar su estado de conservación.
«SCANS-III es un buen ejemplo de cómo la colaboración internacional a nivel de la UE es necesaria para la evaluación de la situación actual y determinar las tendencias en la abundancia y distribución de estas especies de amplia distribución», comenta Begoña Santos, jefa del Área de Pesquerías del IEO y responsable junto con Xulio Valeiras de la campaña a bordo del Ángeles Alvariño. «Esta información es necesaria para diseñar medidas de conservación adecuadas» , añade la investigadora.
Identificar presiones
Estas nuevas estimaciones de abundancia pasarán a integrar las evaluaciones de OSPAR (Convenio sobre la protección del medio marino del Atlántico Noreste) sobre la calidad del medio ambiente marino y del buen estado ambiental en lo referente a las Estrategias Marinas europeas . Los resultados también permitirán determinar el impacto de las capturas accidentales y otras presiones humanas sobre las poblaciones de cetáceos, cumpliendo los requisitos de la Directiva Hábitats y del Acuerdo sobre la Conservación de Pequeños Cetáceos en el Mar Báltico, Atlántico Noreste, el Mar Céltico y el Mar del Norte.
«Los resultados de estas campañas internacionales a gran escala en las dos últimas décadas –SCANS III es la tercera de una serie que comenzó en 1994 (SCANS) y continuó en 2005 (SCANS-II)- han ampliado nuestro conocimiento sobre la distribución y abundancia de especies de cetáceos en aguas atlánticas europeas, permitiendo que la captura accidental y otras amenazas antropogénicas sobre estas poblaciones se encuadren en un contexto poblacional, proporcionando una base sólida para poder evaluar su estado de conservación », explica Philip Hammond, coordinador de SCANS-III.