33 muertos y 6.500 evacuados por los incendios en el oeste de Estados Unidos
Las autoridades piden a los ciudadanos que se queden en casa por las densas humaredas
Al menos 33 personas han fallecido ya en la gran oleada de incendios que arrasa la costa oeste de Estados Unidos y que ha provocado evacuaciones masivas y escenas propias de cine de ciencia ficción, con cielos encapotados y rojizos en grandes zonas metropolitanas como la de San Francisco. Esas evacuaciones además se producen en el contexto de la pandemia de coronavirus, que se ha cebado con EE.UU. más que con ningún otro país del mundo, con más de seis millones de contagios y 190.000 muertos hasta la fecha.
Las nubes masivas de humo que producen los incendios forestales plantean además graves riesgos para la salud de millones de personas, sobre todo aquellas con dolencias respiratorias, y complican las labores de los equipos de rescate por sus efectos negativos sobre la visibilidad. El estado de Oregón emitió ayer domingo una notificación de emergencia por calidad del aire «peligrosa o muy insalubre» . Las autoridades han recomendado que los ciudadanos no afectados por los incendios se queden dentro de sus hogares.
De los muertos por los incendios, 22 son de California, 10 de Oregón y uno del estado de Washington. Las escenas en muchos de los puntos calcinados por el fuego son propias de una guerra, con prados arrasados, casas reducidas a cenizas y coches carbonizados.
Ataques políticos
Los gobernadores de los tres estados, que son todos demócratas, han culpado al calentamiento global de estos fuegos . Por su parte, Donald Trump acusó no hace mucho a California de no cuidar de los bosques y zonas verdes para prevenir que se propaguen los incendios. De momento, el presidente, que ayer estuvo en Nevada, no ha recuperado estos ataques en la campaña electoral.
El candidato demócrata, Joe Biden, a quien las encuestas dan por ganador seguro en los tres estados afectados, dijo que es «absolutamente necesario actuar ahora para evitar un futuro plagado por un aluvión interminable de tragedias como la que están sufriendo las familias estadounidenses en la costa oeste hoy».
En los tres estados , 6.300 personas se encuentran en refugios y hoteles de emergencia de la Cruz Roja y hasta 50.000 más podrían acabar en ellos antes de que la situación esté totalmente bajo control, aunque se alejan de la cifra de 500.000 evacuados que inicialmente, por error, comunicó el estado de Oregón.
La Cruz Roja tiene ahora la labor añadida de evitar que el virus se propague en los refugios que gestiona, algo para lo que realiza pruebas de diagnóstico periódicas al personal sanitario.
Aquellos empleados, voluntarios o evacuados que dan positivo o presentan síntomas son enviados de inmediato a refugios especiales de aislamiento, donde quedan en régimen de aislamiento. La alternativa, en determinados condados, es enviar a los evacuados a hoteles. En California, donde miles de personas se vieron obligadas que huir del incendio que ha sido bautizado como Creek Fire, más de 1.200 evacuados se alojan en 30 de esos hoteles.