Portugal se moviliza contra el maltrato a los caracoles… mientras el caviar blanco se cotiza a 1.500 euros el kilo

Caminos cruzados: mientras hace furor el caviar de caracol (más conocido como caviar blanco) en Portugal, el grupo ecologista Acçao Directa se lanza a armar ruido para concienciar al pueblo luso de que no lleve a su mesa este animal.

«¿A usted le gustaría ser cocido vivo? A ellos tampoco», reza el eslogan de la campaña, que inunda Lisboa y Oporto ahora que miles de portugueses optan por comer caracoles y relamerse en las terrazas. Algo que saca de sus casillas a estos activistas pacíficos pero beligerantes, que no se dan por rendidos ante esta costumbre gastronómica que se repite año sí y año también.

El caso es que inciden en el hecho de que las cazuelas se pongan al vapor con los caracoles aún vivos . Así, los integrantes de Acçao Directa declaran al respecto: «Sufren cuando son instrumentalizados simplemente para satisfacer el paladar de quien los busca para comérselos».

Mientras tanto, el caviar de caracol portugués arrasa como manjar ‘gourmet’ y se exporta a mercados como Francia y España. Cotiza ya a 1.500 euros el kilo. Una tendencia culinaria que se ha puesto de moda en el último año y ve el auge de compañías como Caviar Blanc , ubicada en el Algarve y catapultada a golpe de ‘boom’ turístico.

Por supuesto, el caviar de caracol se produce en otros lugares también, pero el éxito del criado en Portugal tiene que ver con la ausencia de cualquier proceso de pasteurización , lo que se traduce en un sabor más puro. Tanto es así que el próximo paso será venderlo en China, Singapur y Emiratos Árabes Unidos.