La obsesión del Gobierno turco con la maternidad

Para el ministro de Salud, «las madres no deberían anteponer ninguna otra carrera a la maternidad en el centro de sus vidas»

La obsesión del Gobierno turco con la maternidad reuters

daniel iriarte

El pasado 1 de enero, el ministro de Salud de Turquía, Mehmet Muezzinoglu, visitó en el hospital al primer bebé nacido en el año 2015. Político al fin, aprovechó para hacerse la fotografía pertinente y para compartir con la audiencia unas reflexiones que no pasaron desapercibidas. «Las madres no deberían anteponer ninguna otra carrera a la maternidad en el centro de sus vidas. Deberían poner la crianza de buenas generaciones en el centro de su atención», dijo el ministro.

Sus comentarios fueron inmediatamente replicados por la escritora Elif Shafak , que tuiteó: «La maternidad no es una carrera [profesional]. Las mujeres turcas deberían decidir su propio camino en la vida». La diputada opositora Aylin Nazliaka aseguró: «La única carrera del ministro debería ser dejar de hablar. No hay sinceridad en esta mentalidad que glorifica la maternidad, hay otros motivos detrás de estos comentarios. El objetivo es convertir a las mujeres en ciudadanas de segunda clase». Muezzinoglu trató de defenderse alegando que lo que quería decir es que la maternidad es «indisputable y sagrada», y reservada al género femenino, fuera del alcance de los hombres. Unas explicaciones que tampoco convencieron demasiado.

Pero estas declaraciones volvieron a poner de manifiesto la obsesión que el gobierno turco exhibe respecto a la procreación. «Tened al menos tres hijos», ha dicho en varias ocasiones el presidente turco Recep Tayyip Erdogan a las mujeres de su país (a las que alguna vez ha pedido hasta cinco vástagos). «Uno o dos no son suficientes, necesitamos una población más joven y dinámica. Lo necesitamos para poder llevar a Turquía por encima del nivel de las civilizaciones modernas», declaró a finales de 2013.

Una obsesión motivada por el papel que el islamista Partido Justicia y Desarrollo (AKP) de Erdogan reserva a la mujer, pero también a las elevadas tasas de divorcio del país, y a unos índices de natalidad más o menos bajos. Al menos para los deseos del líder turco, quien también ha arremetido contra los controles de natalidad y las cesáreas.

Pero ahora, las autoridades turcas parecen dispuestas a intervenir para cambiar eso. El gobierno ha diseñado diversas campañas para incentivar el matrimonio y la procreación: por ejemplo, el Ministerio de Familia y Políticas Sociales otorga subvenciones de 10.000 liras (unos 3.000 euros) para las parejas que se casen jóvenes, asegura la cancelación de los pagos de los préstamos universitarios si los estudiantes pasan por el altar antes de acabar sus estudios, y proporciona alojamiento gratuito en los campus para los matrimonios.

¿Qué edad es considerada adecuada para optar al enlace? Aunque algunos destacados islamistas turcos han insistido en que n o existe una edad mínima -Nureddin Yildiz, director de la ONG Fundación Fábrica Social, se enfrenta a un posible juicio por sugerir en televisión que es lícito que «una niña de 7 años se case con un hombre de 25»-, los representantes del AKP parecen ser algo menos radicales. El propio Muezzinoglu fijó los «22 o 23 años» como una edad razonable para el casamiento.

El año pasado, Erdogan aconsejó a las muchachas de su país: «No retraséis vuestro matrimonio. Decidid rápidamente y casaos mientras estudiáis, o inmediatamente después de graduaros, el momento en el que encontráis vuestro destino. No seáis demasiado selectivas. Si lo sois, no lo lograreis». Desde entonces, al menos tres mil jóvenes han contraído matrimonio a una edad temprana para beneficiarse de estas medidas, según las estadísticas oficiales.

Además, desde enero el gobierno ha puesto en marcha un programa de «cheques bebé», que aumenta progresivamente por cada nuevo vástago añadido a la familia: 300 liras (casi 100 euros) por el primer hijo, 400 liras por el segundo, y 600 por el tercero.

«La población de Turquía está envejeciendo rápidamente. Para proteger la familia y el dinamismo de nuestra población, tenemos que apoyar a las mujeres y la vida familiar», declaró el primer ministro Ahmet Davutoglu en el momento de anunciar la medida. Un plan que el ejecutivo del AKP quiere extender incluso a las comunidades turcas en el extranjero, según anunció el propio Davutoglu pocos días después en Berlín. El gobierno turco ha llegado al extremo de prometer que, si los nuevos padres abren una cuenta de ahorro a nombre del bebé y no tocan nunca ese dinero, añadirá un 15 % a la cantidad que haya en ella cuando este alcance la edad de casarse.

Estas medidas han sido recibidas de forma diversa en Turquía. En algunos casos, se ha aplaudido el que el AKP de Erdogan haya promulgado medidas para mejorar las condiciones laborales de las funcionarias con hijos de muy corta edad. «Las madres podrán ser ascendidas incluso durante su baja sin sueldo. También promoveremos el trabajo a tiempo parcial para las madres. Tras el final de la baja de maternidad, las madres con un niño tendrán derecho a trabajar a tiempo parcial durante dos meses, aquellas con dos hijos durante cuatro meses, y aquellas con tres o más hijos, durante seis meses, y recibirán su salario completo», aseguró Davutoglu.

Sin embargo, el componente eminentemente machista de estos programas ha sido muy criticado por la oposición y los grupos feministas. «Lo importante no es lo que se pone sobre el papel, sino la realidad práctica. Las mujeres necesitan protección porque son seres humanos, no porque pertenezcan a un género diferente», declaró Ersan Sen, profesor de derecho, a la publicación «Al Monitor». Para otros, como Figen Yüksekdag, copresidenta del partido de izquierdas HDP, el panorama es aún más negro: «Si un presidente dice que la naturaleza de una mujer no es igual a la del hombre, no hay forma de hallar igualdad o justicia en este país para nadie por mucho que lo desees».

La obsesión del Gobierno turco con la maternidad

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación