El Papa advierte de que al eliminar las diferencias entre sexos «corremos peligro de dar un paso atrás»
En su opinión, la teoría de género puede ser muestra de «una frustración y una resignación que intenta cancelar la diferencia sexual porque no sabe afrontarla»
En un análisis sobre la «diferencia y complementariedad entre hombre y mujer», el Papa Francisco alertó en la audiencia general del miércoles que «la cultura moderna ha abierto nuevos espacios de libertad y comprensión de la diferencia, pero ha introducido también muchas dudas y mucho escepticismo».
Como hipótesis que merece estudio, Francisco afirmó: «me pregunto, por ejemplo, si la llamada teoría del género no pueda ser también expresión de una frustración y de una resignación que intenta cancelar la diferencia sexual porque no sabe afrontarla. Sí, corremos peligro de dar un paso atrás».
Ante unas setenta mil personas, el Papa añadió que «eliminar la diferencia es el problema, no la solución. Para resolver sus problemas de relación, el hombre y la mujer deben, por el contrario, hablarse más, escucharse más, conocerse más, amarse más. Deben tratarse con respeto y cooperar con amistad».
Consciente de la crisis en las relaciones, el Santo Padre comentó que «los lazos matrimoniales y familiares son una cosa seria, y lo son para todos, no solo para los católicos. Querría exhortar a los intelectuales a no abandonar este tema, como si fuese secundario en el esfuerzo por lograr una sociedad más libre y más justa».
En todo caso, algunos puntos están claros, y el Papa afirmó que «debemos hacer mucho más en favor de la mujer si queremos reforzar la reciprocidad entre hombres y mujeres».
Francisco insistió en que «es necesario escuchar más a la mujer para que su voz tenga un peso real, una autoridad reconocida, en la sociedad y en la Iglesia». En su opinión, «todavía no hemos entendido en profundidad las cosas que puede darnos a nosotros y a la sociedad el genio femenino , que ve las cosas con otros ojos, que complementa el pensamiento de los hombres».
El Papa hizo notar que «el libro del Génesis insiste en que ambos son imagen de Dios. No sólo el hombre, no sólo la mujer, sino también como pareja son imagen de Dios ».
En ese contexto religioso, se preguntó «si la crisis de confianza colectiva en Dios, que nos hace tanto daño, no está relacionada con la crisis de la alianza entre el hombre y la mujer». Y se despidió invitando a los fieles a «redescubrir la belleza del plan creador, que inscribe la imagen de Dios también en la alianza entre el hombre y la mujer».
Noticias relacionadas