El Papa aplaude a Pío XII por terminar con la «dictadura» del ayuno eucarístico
«Muchos fariseos se escandalizaron: ‘¡Herejía! ¡Ha cambiado la disciplina de la Iglesia!’»
El Papa Francisco ha aplaudido a Pío XII porque “nos liberó de aquella cruz tan pesada que era el ayuno eucarístico”, una norma disciplinaria tan exagerada que resultaba una “dictadura”, como la definió el domingo en su visita a una parroquia de Roma.
En la homilía de la misa del lunes, comentando una ofensiva de los fariseos contra Jesús por cuestiones formales, el Papa recordó que “Pío XII nos liberó de aquella cruz tan pesada que era el ayuno eucarístico”.
El Santo Padre recordó que en su juventud “no se podía beber ni una gota de agua. ¡Ni una! Y para lavarse los dientes había que tener cuidado para no tragar agua”.
Poner punto final a aquellas exageraciones costo muchas críticas pues, según el Papa, “cuando Pío XII cambió la disciplina dijeron ‘¡Herejía! ¡Ha cambiado la disciplina de la Iglesia!’ Muchos fariseos se escandalizaron. Muchos. Porque Pío XII había hecho como Jesús…”.
Aunque en ningún momento se refirió a debates actuales similares, los comentarios del Papa podían leerse como una respuesta a los rigoristas que le acusan -a él y a algunos cardenales- de ser “demasiado” misericordiosos.
El Papa invitó a huir de la hipocresía y a poner el corazón en Dios y en los demás, evitando los juicios condenatorios: “Nunca condenar. Nunca. Si tienes ganas de condenar, condénate a ti mismo, que algún motivo tendrás, ¿no?”. Y terminó su homilía pidiendo “que el Señor nos conceda una gracia que los fariseos no tenían: la gracia de sentirse pecadores”.
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