Papa Francisco: «El cristiano no tiene miedo a ensuciarse las manos con los pecadores»

Comentando el Evangelio del día, que recoge fuertes críticas de los fariseos a Jesús porque «acoge a los pecadores y come con ellos», el Papa Francisco subrayó que, efectivamente, el comportamiento del Salvador «era un verdadero escándalo en aquellos tiempos y para aquella gente. ¡Imaginaos si hubiese periódicos!».

En la homilía de la misa de las siete de la mañana en Casa Santa Marta, el Papa invitó a seguir el ejemplo del Buen Pastor, que sale a buscar la oveja perdida, en lugar de limitarse a criticar como los fariseos, que «no quieren ensuciarse las manos con los pecadores».

Según el Santo Padre, «el verdadero pastor, el verdadero cristiano tiene el afán de que ninguno se pierda, y por eso no tiene miedo a ensuciarse las manos. No tiene miedo». Con esa valentía, «va a donde tenga que ir. Arriesga su vida, su fama, su comodidad y su status, incluso la pérdida de la carrera eclesiástica , pero es un buen pastor», pues imita a Jesucristo.

Su comportamiento es el contrario de «los fariseos, que no sabían lo que es cargar con ternura sobre las propias espaldas la oveja perdida y llevarla a su sitio. Esa gente no sabe lo que es la alegría ».

El Papa concluyó su breve homilía invitando a «no tener miedo de que se hable mal de nosotros por salir al encuentro de nuestros hermanos y hermanas alejados del Señor. Pidamos esta gracia para cada uno de nosotros y para nuestra Madre, la Santa Iglesia».