Teresa Romero: catorce días de lucha contra el ébola
La evolución de Teresa Romero desde que fuera ingresada en Urgencias del Hospital del Alcorcón
6 de octubre
Teresa Romero es ingresada en Urgencias del Hospital del Alcorcón en la madrugada del día 6 de octubre. La infectada presenta los primeros síntomas: erupción cutánea, mialgias y malestar. Tiene además tos «con expectoración» y su cuadro empeora a lo largo del día.
7 de octubre
A las 00.40 horas del martes es trasladada al hospital Carlos III. A lo largo del día se le administran dos dosis del suero hiperinmune de una religiosa que superó la enfermedad. La auxiliar de enfermería experimenta una leve mejoría aunque sigue con fiebre.
8 de octubre
Cuarenta y ocho horas después de su ingreso en la sexta planta del Carlos III, la auxiliar de enfermería ya no tiene fiebre. Durante el transcurso del día, le suministran la tercera dosis de plasma para que su organismo genere anticuerpos contra el virus.
9 de octubre
El estado de Teresa empeora. Aunque no tiene fiebre y sigue respirando por sí misma, su situación es crítica. Romero tiene un fallo multiorgánico grave. Concretamente tiene afectados el pulmón y el hígado, dos órganos vitales. Además lleva dos días sin comer.
10 de octubre
Sus pulmones son sus órganos más complicados, de hecho, necesita una mascarilla de oxígeno. Respecto al hígado, los resultados analíticos indican mejoría. Sigue consciente y sin fiebre. Recibe la sexta transfusión de suero hiperinmune.
11-12 de octubre
Su evolución es buena aunque su pronóstico sigue siendo grave, puesto que sus pulmones están dañados. La carga viral comienza a bajar y pese a que solo se alimenta con suero comienza a beber agua. Teresa está animada, orientada y colabora con el equipo médico.
13 de octubre
Mejora en casi todo salvo en sus pulmones. Por eso se teme más por las secuelas del virus que por la propia infección. Sube ligeramente la fiebre así como también su carga viral y continúa con la sensación de ahogo. Su pronóstico es reservado.
14 de octubre
Supera la fase crítica. Los datos dicen que pasado el día 14 con síntomas, hay más posibilidades de sobrevivir. Mejora el distrés respiratorio; incluso la concentración parcial de oxígeno en sangre se ha normalizado con el aporte de la mascarilla.
15-16 de octubre
Habla por teléfono, bebe, está animada y no tiene fiebre. Su mejoría es clara, pero la recuperación de sus órganos es muy lenta. Su ánimo también parece mejorar. La carga viral ha bajado sensiblemente y comienza a mostrar signos de superar la infección.
17 de octubre
Este viernes se sentó por primera vez y la cantidad de oxígeno que recibe a través de la mascarilla se ha reducido considerablemente. Sigue sin fiebre, con una carga viral muy baja pero aún tomando favipiravir (el antiviral japonés indicado para la gripe).
18 de octubre
Teresa deja de tomar antiviral y empieza a ingerir alimentos por vía oral. Además, su carga viral está «en el límite de detección».