«Tuvieron a mi padre 28 horas en Urgencias esperando cama, a sus 88 años»
El Virgen del Rocío afirma que la familia rechazó el traslado a otro hospital
![Vista de las Urgencias del Hospital General este mes de noviembre, cedida por un enfermo](https://s2.abcstatics.com/media/sevilla/2016/11/24/s/anciano-espera-cama-koGI--620x349@abc.jpg)
Desde que ingresó en Urgencias del Virgen del Rocío el pasado lunes día 21 a las cuatro y media de la tarde hasta ayer martes a las nueve y media de la noche, Francisco Holgado Montes, de 88 años de edad y enfermo crónico no pudo descansar en su cama, cómodamente, acompañado de un familiar. Así lo ha denunciado su hija, Ángeles Holgado Vázquez , que ha registrado una hoja de reclamaciones en el hospital y denunciado a ABC el calvario que pasó su padre, asfixiándose y con encharcamiento de pulmón en unas Urgencias que califica de «tercermundistas o peor porque yo creo que en un hospital de África se está mejor ya que allí no había el lunes no sólo cama sino ni silla para los familiares, y la gente se tenía que sentar en el suelo».
Según relata, el hombre llegó a las Urgencias del General el lunes a las cuatro y media de la tarde asfixiándose y fue atendido a los veinte minutos.
Luego, sobre las 5, le dijeron que tenía que quedar ingresado y a partir de entonces y hasta las once y media de la noche estuvo en la sala de espera en una silla de ruedas. «A esa hora llegaron y nos dijeron que no había cama y que se tendría que quedar en Observación pero, como aquí tampoco había, lo llevaron a la Unidad de Estancias Cortas que es una sala en la que está en un sillón . Allí se quedó hasta las nueve y media de la noche de ayer, cuando subió a la planta segunda a su cama».
Durante esas cerca de treinta horas desde que Francisco llegó en una ambulancia al hospital, la familia, concretamente Ángeles, sufrió, según señala, «malos modales del personal sanitario, la masificación del centro y el desconcierto que se origina en una casa cuando hay un enfermo ingresado».
Además, asegura que le ofrecieron una cama en el hospital de San Juan de Dios, de la Avenida de Eduardo Dato y que se negó «porque este hospital es para enfermos terminales, el Virgen del Rocío es el suyo y yo quiero que le traten aquí». «Además —sigue— está a cuatro minutos de su casa andando y mi madre es mayor y tiene que venir a verlo».
A todo ello, fuentes de la Dirección del Virgen del Rocío contestan que, a pesar de que el lunes fue un día excepcional de alta frecuentación de las Urgencias del General (419 pacientes), Francisco estuvo siendo tratado durante todo el tiempo antes de subir a planta y que se le ofreció una cama en dicho centro concertado, que no es ni mucho menos para enfermos terminales, que la familia rechazó. Explican que estuvo en esa Unidad de Estabilización Clínica (estancias cortas) por la propia naturaleza de la patología de este paciente que, como muchos otros, necesitan ser estabilizados antes de subir a planta. «La cama se le asignó a las dos de la tarde pero hay que esperar a que llegue la ambulancia para el traslado de quien la deja. Por eso la ocupó tan tarde » , terminan,