Triana hace cábalas sobre quién ha ganado los 55 millones de euros

La lotera se desmarca de las especulaciones y asegura ignorar la identidad del premiado

Una reportera ayer ante la administración de lotería que repartió el premio en la calle San Jacinto RAÚL DOBLADO

MANUEL MARÍA BECERRO

Si los rumores que han empezado a correr por San Jacinto y alrededores son atinados, un joven de unos 25 años sería el único acertante del premio de 54,8 millones de euros (unos 9.200 millones de las antiguas pesetas) repartido en la noche del viernes por el bote del sorteo Euromillones.

No es que nadie viera ayer al supuesto agraciado presumiendo de lozanía y boleto junto a la administración número 40 de la capital, que de hecho permanecía cerrada a cal y canto como todos los sábados de julio y la mayoría de los de agosto, perdiendo quizá una oportunidad de oro para hartarse de vender a curiosos y turistas atraídos por las cámaras de televisión y los micrófonos más coloridos.

Pero se habla de un «chavalito», no de un jubilado o de un padre de familia en paro. La duda es si se trata de pura habladuría o incluso de un bulo interesado , que también puede haber quien no quiera que lo identifiquen con una fortuna sobrevenida de casi 44 millones de euros limpios de polvo y paja (11 millones engrosarán las arcas de la Hacienda Pública por la reforma aprobada en 2012 por el Ministerio de Hacienda dirigido por Cristóbal Montoro). «Si es del barrio, nos enteraremos pronto de quién es », apuestan los trianeros de pro.

«Ni idea»

Quien no entra en dimes y diretes es Regla Peinado , la dueña de la administración lotera ubicada en la zona peatonal de San Jacinto, concretamente en los bajos de la casa natal del que fuera gobernador del Banco de España y ministro de Ultramar Antonio María Fabié y Escudero. «La verdad es que he hablado con las dos empleadas y ninguna tenemos ni idea de quién es el premiado. Pero ni nosotras ni más de un director de sucursal bancaria que me ha llamado para preguntarme quién es. ¿Un muchacho de 25 años? Si fuera así, seguro que ha comprobado el premio por internet. Pero de lo que se diga en la calle yo no me fiaría mucho, que en el barrio de Triana se sabe que cualquier rumor vuela », subraya risueña.

«El lunes abriremos porque queremos ofrecer una copita de celebración y brindar con los clientes. A lo mejor entonces el agraciado se pasa y se presenta , pero si no se asoma, que no tiene por qué hacerlo porque ya no es necesario ir a la administración ni a la delegación para cobrar el premio, es imposible que sepamos su identidad , porque de aquí salen miles de boletos y ni siquiera sabemos si ganó con una apuesta simple o triple ni si la rellenó a mano o se la expendió automáticamente la máquina», precisa Regla.

En todo caso, queda claro que quien haya descorchado el champán lo ha hecho en la intimidad . «Es que las cosas están como para salir a decir que te ha tocado el Euromillón: cogen al que lo diga y lo estrangulan», argumentaba ayer María, clienta habitual de Regla Peinado. De hecho, lleva encima un boleto del sorteo del pasado viernes. Lo busca en el monedero y lo desdobla entre la expectación de los plumillas, claro, no vaya a ser que, por un casual,... «No, no: ¡si ya lo he mirado yo en casa!», despeja. Y, en efecto, no tiene la combinación mágica: 5, 6, 22, 25 y 34 más las estrellas 5 y 8 que han vestido de oro a un chico de 25 años o quién sabe a quién .

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