La terminación de Lotería más vendida en Sevilla para el sorteo de Navidad es el 155

En apenas 24 horas, muchos dejarán de tener agujeros en sus cuentas o letras pendientes con el banco. Los niños de San Ildefonso terminan de ensayar cómo cantarán el gordo, mientras las administraciones de lotería venden los últimos números, los restos de un año que aseguran es mejor que los anteriores. Lo que no cambia son las terminaciones más vendidas, aunque este año se ha colado un artículo de la Constitución.

«Este verano vino un señor a la Administración pidiendo el número 155, y la verdad es que nos extrañó mucho. Hasta que nos explicó que se debía al artículo de la Constitución y el conflicto catalán» explica Alicia Ortega, de la Administración El gato negro . Desde aquel día, comenta esta vendedora de lotería, no ha parado de venir gente pidiendo este número. «Pero está agotado en toda España desde hace tiempo» dice Ortega.

Según la presidenta de Loterías y Apuestas del Estado, Inmaculada García , este hecho no ha sido sólo en Sevilla, sino en todo el territorio nacional. Se vendieron rápidamente los décimos del 00155, y después se agotaron los que terminan en 155 .

Al margen de esta caprichosa terminación, los más vendidos siguen siendo los billetes que terminan en 13, 7 y 5 . En la Administracion de El Duque, sólo quedan por vender un par de números «porque nos los han devuelto de hermandades que no han vendido todo» explica el responsable, Enrique Cristelly, aunque también ha habido peticiones un tanto extrañas. «Vino un señor y me pidió un número que coincidía con la fecha en la que murió su padre» dice Cristelly.

Y es que los números están todos en el bombo y puede salir cualquiera de ellos, aunque hay terminaciones que parecen casi imposibles. «Lo más raro que me han pedido ha sido los cinco ceros, el 00000, pero ese número no se vende» comenta a ABC el responsable de la Administración Tetuán, José Muñoz .

Sea cual sea el número, lo que sí que se repite es el rito del Gato Negro . Para que la suerte le acompañe, dice la tradición, se ha de frotar el décimo sobre el felino negro que flanquea la puerta de entrada de la administración de lotería más popular en Sevilla.