Lo llevó a Alcalá de Guadaíra

Un taxista mileurista devuelve una mochila con 5.500 euros a un cliente

Eran los ahorros de dos meses de trabajo que olvidó al bajar del coche y encontrarse con su hijo de 6 años

Arriba, a la derecha, Jorge Núñez entregando la mochila a Marcello Domenico que le ha dado 100 euros de propina ABC

Amalia F.Lérida

Un taxista sevillano mileurista, con la mujer en paro y tres hijos de 8,6 y 4 años de edad ha devuelto a un cliente 5.560 euros que iban dentro de una mochila que se dejó en el taxi.

Jorge Núñez Ramos, de 36 años de edad y vecino de Sevilla-Este, llevó esta mañana en el coche a sus hijos al colegio y a su mujer al gimnasio y cuando se montaron todos dentro la mayor se dio cuenta de que en la parte de atrás había una mochila.

Dada la prisa que tenía por dejar a los chiquillos en la escuela la guardó y después, antes de que la esposa llegara a su destino, se detuvo para mirar qué había dentro y de quién era porque el día anterior había dado varios viajes.

La abrió y encontró dentro una cartera por la que ya asomaban billetes. Pero no podía imaginar que eran tantos. Muchos. Muchísimos. Un total de 5.560 euros.

Inmediatamente dio parte a Solidaridad del Taxi , asociación a la que pertenece, y empezaron las gestiones para localizar al dueño de la mochila que ya había llamado a las emisoras dando la descripción de Jorge y diciendo que era un muchacho con 3 hijos.

Y es que a los dos les dio tiempo de conocerse ya que el cliente, Marcello Domenico , un italiano de 45 años de edad , que llevaba dos meses fuera trabajando, se montó en el taxi en el aeropuerto de Sevilla rumbo a su domicilio en Alcalá de Guadaíra y por el camino los dos hombres tuvieron oportunidad de charlar.

Dice Jorge Núñez que cuando se bajó del taxi se fue corriendo para él su niño de 6 años llorando de emoción porque hacía dos meses que no lo veía y entonces se le olvidó hasta la mochila.

La entrega se ha realizado hoy mismo, poco antes de las dos de la tarde, y el cliente le ha dado al taxista 100 euros de propina, dos billetes de 50, por su buena y encomiable acción. La alegría ha sido tremenda y, de camino, como necesitaba un taxi, Jorge lo ha dejado de balde en otro nuevo destino.

El taxista, que el próximo mes de febrero hac e 14 años en el oficio, estaba hoy muy orgulloso de haber ayudado a un hombre, también trabajador como él, y relató que todos los días los compañeros se encuentran cosas en el taxi que se dejan los clientes que cogen en el aeropuerto: desde teléfonos móviles hasta preservativos pasando por algún billete suelto , portátiles y documentación importante.

Afirma que los hallazgos son diarios y que él colabora en su asociación para que todo llegue a sus dueños. El gremio está en contacto con el Instituto del Taxi y la Policía Local con el fin de agilizar la localización del cliente olvidadizo y devolverle sus pertenencias, algo que se consigue en el 99% de los casos.

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