Estadística anual sobre variaciones residenciales
Sevilla recupera el saldo migratorio positivo después de cinco años
Durante el pasado 2017 se registraron 54.651 entradas frente a las 53.649 salidas, rompiéndose así la tendencia negativa que había desde 2012
El saldo migratorio en Sevilla vuelve a ser positivo después de cinco años. Así se desprende de las últimas estadísticas sobre Variaciones Residenciales del Instituto de Estadística de Andalucía correspondiente al pasado año 2017, en las que se refleja que los movimientos de entrada en la provincia fueron de 54.651 frente a los 53.649 de salida, resultando un saldo migratorio positivo, de 1.002 personas. Se rompe así la tendencia negativa de los cinco años anteriores. Sevilla empieza a recuperarse de los efectos de la crisis y precisamente el saldo migratorio es uno de los parámetros que apuntan a esta recuperación. Junto a éste hay otros indicadores que ya habían puesto de manifiesto la leve recuperación que había iniciado la provincia en el último año.
El saldo migratorio no tiene que ver con el aumento o retroceso de la cantidad de habitantes de una región, ya que no contempla los nacimientos ni los decesos . Se conoce como saldo migratorio a la diferencia existente entre la emigración y la inmigración en un determinado lugar. A raíz de la crisis económica se produjo un notable cambio en el saldo migratorio , pues muchos sevillanos, ante la falta de trabajo, tuvieron que cambiar su lugar de residencia en busca de oportunidades laborales. De hecho, hay que remontarse hasta 2011 para encontrar el último año en el que la provincia registró un saldo migratorio positivo que fue de 4.671 personas , una cifra que dista aún mucho del saldo contabilizado el pasado 2017.
La mayoría de los movimientos residenciales registrados en Sevilla fueron dentro de la comunidad autónoma andaluza, donde se contabilizaron más de 35.6298 desplazamientos (el 66 por ciento) , seguidos por los que se hicieron dentro de la provincia, que se cifran en 28.298 (un 52 por ciento). En tercer lugar, destacan las salidas que se realizaron hacia otras comunidad autónomas. En este sentido, los destinos preferidos fueron, por este orden, a Madrid, Cataluña, Islas Baleares, Islas Canarias y Comunidad Valenciana. Por su parte, durante 2017 un total de 5.361 sevillanos cambiaron su residencia al extranjero, lo que supuso un descenso del 17 por ciento en comparación con los que se mudaron a otros países en el año 2016 y que se cifraron en 6.471 personas.
El 51 por ciento de las inmigraciones que recibió la provincia de Sevilla era de ciudadanos que habían nacido en Sevilla y que quisieron retornar a su lugar de origen. Le siguen las entradas de andaluces que se cifraron en un 65 por ciento. De otra parte, casi 9.500 personas desembarcaron desde otros puntos del país, sobre todo de Madrid, Cataluña y las Islas Canarias, mientras que un total de 9.364 llegadas registradas en la provincia procedían del extranjero.