Sevilla
En prisión por prender fuego a la casa de la familia de su pareja y a su moto
Como consecuencia del incendio del vehículo una vecina y sus dos hijos de 4 años y un mes resultaron heridos
El Juzgado de Violencia sobre la Mujer número 4 de Sevilla tiene abierta una causa contra D.P.H., un joven de 32 años, por prenderle fuego a una vivienda de la familia de su pareja y a la moto de ésta un día después de que ella denunciara ante la Policía Nacional un episodio de malos tratos.
La denunciante, de 34 años y con dos hijos de 17 y 6 años de sendas relaciones anteriores , compareció ante la Policía Nacional para denunciar los malos tratos físicos y psíquicos sufridos por parte de su pareja, con el que llevaba tres años de relación.
Ante los agentes, la mujer dijo haber sufrido malos tratos tanto físicos como psicológicos, «prácticamente desde después del primer año de convivencia». Relató que los físicos habían sido agarrones, empujones y tirones de pelo , así como le arrojaba objetos. «Sólo una vez recibió una patada y un puñetazo «, dijo a los agentes en referencia a un episodios ocurrido tres meses atrás.
Pocas fueron las veces que había acudido al médico y en éstas le decía que se había caído de las escaleras , aunque no aportó ningún informe a este respecto que pudiera certificar sus palabras.
Los malos tratos psicológicos denunciados hacían referencia a amenazas e insultos como «te tengo que coger y te voy a matar» o « a tu niño mayor le caneo la boca «. Además, añadió a los agentes que cuando se peleaban su pareja le destrozaba la casa y ella se iba para evitar sufrir agresiones.
Agresión en Carretera Carmona
Sobre el hecho concreto que llevó a la joven a presentarse en Comisaría dijo que el varón estaba muy agresivo y nervioso y comenzó a tirarle artículos como los juguetes del hijo pequeño. Le había roto la ropa, incluso.
Para evitar que ese episodios fuera a más, ella decidió irse de su casa, pero él la había alcanzado a la altura de Carretera Carmona y le había agarrado del cuello, arrancándole una cadena que tiró al suelo. Sólo la intervención de una vecina evitó que la situación fuese más grave, aunque la joven no pudo concretar quién era esa mujer que le ayudó.
Ella le trasladó a la Policía Nacional que deseaba solicitar medidas de protección como el alejamiento. Se le llegó a ofrecer la posibilidad de una casa de acogida dependiente del Instituto Andaluz de la Mujer.
Un día después, esta denuncia trajo sus consecuencias en forma de represalias por parte del acusado, que fue detenido por la Policía Nacional . Según recogen los agentes en un atestado, al que ha tenido acceso ABC, minutos antes de las diez de la mañana la Policía Local se persona en la calle Licenciado Calderas por un incendio en una vivienda, propiedad de la familia de la víctima.
Los bomberos que acudieron a sofocar el fuego ya comenzaron a apuntar que el incendio podría haber sido intencionado . Una hermana de la denunciante apunta que había sido D.P.H., aunque ella no había sido testigo directo. De hecho, la defensa del detenido, que ejerce el abogado Alberto Castejón, asegura que no existen personas que vieran a su cliente prender fuego ni a la casa ni a la moto.
Además, a unos 150 metros de este primer incendio existe otro fuego. Una motocicleta, propiedad de la víctima, está en llamas en un portal de la plaza de El Begi de la capital. Como consecuencia de este incendio, una vecina y sus dos hijos, uno de cuatro años y otro de un mes, resultaron heridos al salir de su domicilio huyendo del humo. Tuvieron que ser trasladadas al Hospital Virgen Macaren a .
Huyó en patinete
Algunos testigos apuntan que el culpable de este fuego también había sido D.P.H. y que se había marchado del lugar en patinete . Los agentes pusieron en marcha un operativo para localizarlo . Primero en la zona peatonal de la barriada de Las Naciones , hasta que llegó a la calle Acueducto. Entró en un bloque de la calle Aljimez.
En el mismo se ocultó en varios pisos. Incluso, no se pensó saltar por el patio trasero bajando por las tuberías. Amenazó a algunos inquilinos y usó ropa tendida para cambiarse el vestuario con el propósito de despistar a los agentes. Cuando cayó en las manos de los efectivos policiales, además, opuso resistencia .
El varón se encuentra en prisión provisional por los hechos denunciados, tanto por el episodio de malos tratos como por los dos incendios, por los que se podría enfrentar a duras penas de cárcel. Según el Código Penal vigente, los que cometieran un incendio que pusiera en peligro la vida o integridad física de las personas, serán castigados con pena de prisión de diez a veinte años . De momento, la causa continúa instruyéndose en el Juzgado de Violencia sobre la Mujer número 4 de Sevilla.
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