Sevilla

Las nuevas luces «de frigorífico» de la calle Mateos Gago están «avaladas» por la Unión Europea

El Ayuntamiento defiende que son las mismas a las usadas en la Alfalfa y el Salvador y que «no son frías»

La «luz de frigorífico» en la renovada calle Mateos Gago
Javier Macías

Javier Macías

Esta funcionalidad es sólo para registrados

El alumbrado instalado en la calle Mateos Gago , calificado como «luz de frigorífico» por distintos colectivos patrimonialistas, son las que marca la normativa de la Unión Europea . Así lo defiende el Ayuntamiento a raíz del reportaje publicado en ABC que recogía cómo está desapareciendo del urbanismo de la ciudad la tradicional luz cálida por una más blanca.

Se trata de unos led con temperatura de 3.000 grados Kelvin (K) que vienen a sustituir en Mateos Gago a unos faroles «sin óptica con lámpara de vapor de sodio, de tecnología obsoleta, con baja eficiencia energética, alta contaminación luminosa y mala reproducción cromática », señalan fuentes municipales. Así, se han cambiado por unos nuevos faroles instalados «con ópticas y leds cálidas, con buena reproducción de los colores y buen rendimiento energético». La calle, según explica el Consistorio, tenía unas lámparas de vapor de sodio que «emitían una luz amarilla en el entorno de 2.000 K, con índice de reproducción cromática de los colores muy escasa, del orden del 25% respecto al 100% que es aquella que reproduce exactamente los colores de los objetos (la solar). La luz amarilla del sodio no permite distinguir los colores de los objetos ni de las fachadas de los edificios o calzadas».

De esta forma, desde el Ayuntamiento se apunta que la luz actual en esta vía es «cálida» y que una luz fría -como critican los patrimonialistas- es un led con temperatura muy superior a los 3.000 K. En este sentido, afirman que la luz de Mateos Gago es similar a las existentes en las calles Córdoba, Lineros, Puente y Pellón, el Salvador, la Alfalfa o la Pescadería y que «en todas estas zonas existe una luz con temperatura de color entre 2800 y 3000 K, ya sea con lámparas de descarga de halogenuros o bien con leds, pero en ninguna de ellas existe, hace ya varios años, luz amarilla de sodio».

Por ello, consideran que el alumbrado que está colocado en las farolas de estas calles reurbanizadas tiene «una eficacia luminosa lumen /watio adecuada» y que lo que se pretende es iluminar con una tonalidad de luz que no sea fría para evitar que la instalación tenga excesivas luminarias y por tanto excesivo consumo energético y consiguiendo esa eficacia.

Los técnicos de la Gerencia se han basado en el documento «Iluminando las ciudades: acelerando el despliegue de soluciones de iluminación Innovadoras en las ciudades europeas» editado por la UE , que promueve la sustitución de las infraestructuras de alumbrado público municipales con tecnología obsoletas por luminarias leds de bajo consumo energético.

La justificación que aporta el Ayuntamiento es similar a la que da en la polémica por la sustitución de los pavimentos históricos como en Mateos Gago, el adoquín de Gerena, del que considera que «no es accesible». Pese a ello, lo ha recuperado en calles aledañas formando un escenario ecléctico.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación