«El Consejo de Cofradías no se ha beneficiado de las subvenciones del Ayuntamiento y la Junta»

¿En qué situación de las cuentas del Consejo?

Están según lo previsto, pero mejor que la situación que planteamos hace año y medio cuando comenzó la pandemia. Nosotros teníamos aprobado por la asamblea de hermanos mayores, por la comisión económica del Arzobispado y por la Santa Sede un préstamo de dos millones y medio para solventar esta situación, y no ha sido necesario ejecutarlo. La institución no ha tenido que endeudarse y, ahora mismo, lo que tenemos es una póliza de crédito, la misma que ha tenido históricamente el Consejo, con la cual tenemos salvados los problemas de decalaje de la tesorería. Realmente, el estado de las cuentas es bueno porque contamos además con que las subvenciones que se han aportado en este 2021, tanto del Ayuntamiento como de la Junta de Andalucía, podrían haber ido para el Consejo pero hemos decidido que sea para el beneficio de las hermandades. Ya que no han tenido el reparto de aportaciones porque no ha habido carrera oficial, al menos se le han podido absorber gasto.

¿Lo que se le ha repartido a las hermandades ha sido suficiente para salvarles la situación económica?

Realmente a las hermandades este año se le han absorbido gastos que casi es la misma cantidad que en otra época les llegaba como aportación. Entonces, esa cuantía era para cubrir los gastos de una estación de penitencia y este año, como no ha habido, no han tenido que afrontarlo y ese dinero ha ido para la vida cotidiana de la hermandad. Hemos ajustado lo del Consejo a lo máximo para poder darle lo máximo posible a las cofradías. Pese a ello, en el 2021, van a ser unos 38 o 40 actos importantes en la ciudad: exposiciones, conciertos, ciclos de cine y hasta un congreso.

Entonces, ¿estas subvenciones han salvado las cuentas del Consejo?

Las subvenciones han servido para aportarles dinero a las hermandades quitándoles gastos pero la buena salud de las cuentas de la institución viene de la gestión propia interna: ahorro de costes, maximización de donativos y de acuerdos económicos con entidades públicas y privadas. Este año se han firmado más de 300.000 euros de convenios de patrocinio. El Consejo no se ha beneficiado de las subvenciones del Ayuntamiento -que está ejecutada ya al 80%- y la Junta -que se tiene que aprobar aún-, en otras ciudades las agrupaciones de cofradías sí han aprovechado estas contribuciones para sus actos extraordinarios. En cuanto al anticipo que deben devolver las hermandades del año pasado, un 50% ya está amortizado.

¿Y éstas han caído del cielo o se han tenido que negociar previamente?

La subvención, sobre todo la del Ayuntamiento, no ha sido algo que haya llegado de la noche a la mañana. Ha costado mucho tiempo para pedirlas, reiterarlas, reuniones con el alcalde... hasta que por fin ha cuajado. Hemos presentado propuestas y proyectos muy estudiados.

Recientemente esas cuentas se han aprobado por unanimidad. ¿Ha logrado este tiempo de pandemia volver a unir a las hermandades?

El año pasado en el Alcázar se aprobaron por aclamación y además todos acabamos aplaudiendo en pie. Las de este año se han vuelto a aprobar por unanimidad. Hemos actuado todos sin fisuras ni salidas de tono. Queríamos elevar el nivel de la institución y creo que lo hemos conseguido.