Sevilla amanece con 56.000 banderas de España junto al Guadalquivir en memoria de las víctimas del coronavirus
Las laderas del río que se extienden desde el Alamillo a San Jerónimo amanecen sembradas de enseñas nacionales en un nuevo acto de la Asociación Nacional de Víctimas y Afectados por el Coronavirus (Anvac)
Primero fue el Parque Roma de Madrid, luego la playa de La Patacona de Alboraya, en Valencia, y este domingo ha sido el turno de Sevilla. Las laderas del Guadalquivir más cercanas al puente del Alamillo, justo donde concluye la dársena del río, amanecieron este domingo sembradas de 56.000 banderas de España en homenaje a cada una de las víctimas de la pandemia en este país, en la acción más numerosa de todas las realizadas hasta ahora por la Asociación Nacional de Víctimas y Afectados por el Coronavirus (Anvac).
Más de 250 voluntarios llegados de Sevilla capital y de distintos puntos de la provincia participaron desde las seis de la mañana en la siembra de las 56.000 banderas, 3.000 más de las desplegadas en actos precedentes porque «el Instituto Nacional de Estadística (INE), desgraciadamente, ha ampliado el dato de víctimas mortales».
Una hora y media tardaron los voluntarios de Anvac en desplegar las enseñas por los bancales de la margen izquierda del Guadalquivir, la que corresponde a Sevilla, a través de un recorrido que se extendió a lo largo de 1,3 kilómetros . Entre los participantes en esta acción figuraban personas curadas del virus y familiares de fallecidos, convocados por el «boca a boca».
A diferencia de las acciones desarroladas previamente en Madrid y Valencia, los organizadores destacan que en Sevilla se han podido desplegar todas las banderas «sin problemas significativos y que sin la Policía se presentase a pedir documentación» , ya que este tipo de actos no cuentan con permiso municipal. La primera idea de los organizadores fue la de desplegar las banderas junto a las Murallas de la Macarena , un lugar más visible y transitado, pero no había espacio suficiente.
Al mediodía se leyó un manifiesto y se guardó un minuto de silencio, antes de que a las 18.00 horas los propios voluntarios iniciasen la retirada de las banderas.
El presidente de Anvac, Jaime Sánchez, destacó que «muchas familias se habían acercado con sentimiento para fotografiarse» ante este efímero homenaje a las víctimas y lamentó que «cuatro personas» intentaran arrancar las banderas al no entender el significado de esta acción. «Esto no va de política, sino de honrar la memoria de los fallecidos» .
