La verdadera historia de «Las Nanas» de Triana que compuso Manolo Garrido

La víspera del día de Santa Ana es uno de los momentos más especiales de la festividad de Santiago y Santa Ana, que los trianeros aguardan todo el año para no perderse . Unas fechas que tienen una melodía especial: «las Nanas» a la Señora Santa Ana que compusiera Manolo Garrido en los años 70, con música de Manuel García y que tienen en las luminarias su momento más emocionante.

Pasadas las 00:00 horas del ya 2 6 de julio , la torre de la parroquia trianera se apagará y solo quedará iluminada por las bengalas en tonos rojos y verdes, mientras la banda de las Tres Caídas interpretará esta composición musical grabada en el ADN de los trianeros.

Como impulsor de este momento que cumple dieciséis años, Esteban Romera recuerda que «la idea era darle la bienvenida al día de Santa Ana. Conté con Julio Vera para que desde el campanario se tocara a los cuatro vientos una sintonía . No sabíamos cual interpretar y pensamos en las nanas. Quizás es la canción que todos los trianeros conocen , todos alguna vez se han dormido con ella. La parte logística de las luminarias correría a cargo de Guillermo Lasso».

Ideada en los años 70 por el compositor Manolo Garrido (también compuso la Salve Marinera a la Esperanza de Triana ), Romera añade que es un villancico «tremendamente popular y que se canta en las grandes ocasiones ». El director de las Tres Caídas , Julio Vera, recuerda que «Esteban me llamo en el año 2000 para decirme que este año ibamos a recuperar los toques de Santa Ana. Hable con R afael Vázquez , que era nuestro director musical por aquel entonces y teníamos claro que tenían que ser sus nanas. Las adaptamos para tocarlas con un grupo pequeño de la banda. Empezamos siendo ocho y ahora vamos alrededor de cuarenta, todo el mundo quiere participar ». Así nacen las luminarias de Santa Ana.

El acto comienza con un desfile que realiza la banda desde la capilla de los Marineros hasta la parroquia en los minutos previos. A continuación, los músicos suben y, al marcar las 12 un gran repique de campanas antecede a los cuatro toques «para que llegue a todos lados», como comenta Romera. A partir de ahí, las bengalas iluminan el cielo de Triana . Al terminar los gozos, se abren las tres puertas de la parroquia para que comience la salutación y todos los devotos puedan besar a la Santa .

Romera asegura que « sabemos que desde el propio Aljarafe se ve la luminaria . Además, hay muchísimos sevillanos, sobre todo de los Remedios, el centro y Triana, que se van a sus azoteas para verla».

Gozos que tienen como antecedentes más conocidos en el siglo XVII y XVIII. Amparo Rodríguez Babío , historiadora y archivera de la parroquia, comenta que « s e tiene constancia que la torre ya se adornaba con banderas , algo muy característico de la época. En cuanto a la música, lo que existía era de otro formato, llamada ministriles con instrumentos de viento que, quizás, fueran por las calles realizando una especie de bando en la víspera. A continuación, dentro de la iglesia se cantaban todos los años unas coplas que cada julio se estrenaban con la propia capilla musical que poseía la parroquia».

Rodríguez Babío también señala que « cuando eran funciones con un carácter más extraordinario , como cuando declararon a la Inmaculada patrona de España, en Santa Ana se llegaron a tirar fuegos artificiales ».

El paso del tiempo, la desparación de la capilla musical propia y las nuevas modas musicales fueron modificando la fiesta que hoy día conserva el carácter más popular y auténtico del barrio de Triana. La devoción más pura que mantiene el viejo arrabal y que vive un Año Jubilar marcado en la historia de la ciudad . Porque 750 años no se cumplen todos los días .