Una reunión «secreta» de Espadas con el PP rompió el acuerdo de los presupuestos
Ciudadanos apoya las cuentas por segundo año consecutivo a pesar de que no se han ejecutado sus enmiendas de 2016
![El alcalde, el delegado de Hábitat Urbano y el secretario municipal](https://s3.abcstatics.com/media/sevilla/2017/03/15/s/pleno-presupuestos-2017-kIHB--620x349@abc.jpg)
La negociación para aprobar los presupuestos de este año ha tenido muchos entresijos que desvelan por dónde irá la política municipal en el tramo final del mandato de Juan Espadas. El no del PP y el sí de Ciudadanos tienen muchos matices que invitan a pensar que en los próximos ejercicios el PSOE tendrá bastantes más problemas para lograr flotar en la marejada municipal que le ha tocado gobernar. Vamos por partes. Ciudadanos se ha consagrado como la muleta socialista , no sólo porque haya apoyado por segundo año consecutivo los presupuestos, sino porque en esta ocasión lo ha hecho sin que se hayan ejecutado las enmiendas que acordó con el alcalde el año pasado. Se lo recordó Beltrán Pérez en su intervención. Javier Millán apoyó las cuentas en 2016 a cambio de una bajada del IBI , 150.000 euros para un plan estratégico, un plan energético antes del 31 de diciembre, una auditoría de edificios municipales , un programa de apoyo a la escolarización, un plan de becas para reinserción en zonas desfavorecidas, una inversión de 2,5 millones en parques empresariales o la creación del portal del ciudadano, entre otras cosas. Nada de eso se ha cumplido. Sin embargo, repite apoyo. En los pasillos municipales crece la idea de que Millán acabará negociando con Espadas su ingreso en el gobierno . En las propias filas del PSOE lo admiten.
Pero los otros tres partidos han comenzado ya su deriva hacia una oposición más contundente . Participa e IU, que apoyaron la investidura, han comenzado a marcar distancias de cara a las próximas elecciones. Y el PP, que es el partido con más concejales, ha trazado ya su rumbo hacia una oposición más crítica. Aunque PSOE y PP se repelen por decisión de ambos. La demostración de esta situación es una reunión «secreta» que el alcalde mantuvo en su despacho con el portavoz popular, Alberto Díaz, durante el proceso de negociación. De esa cita han trascendido pocos detalles, pero varios concejales de las dos formaciones cuentan que Espadas le explicó a Díaz que prefería su voto en contra porque políticamente no podría explicar su apoyo teniendo un concejal menos. Es decir, podría parecer que el presupuesto era del PP, que es el partido más representativo, y el alcalde no podía permitirse que parezca que gobierna su rival . Dicho más claro: la campaña electoral ya ha comenzado. Y quedan dos años.
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