Un recluso de Sevilla I vuelve a agredir a dos funcionarios de la cárcel con un punzón

El sindicato de prisiones Acaip y la Asociación Profesional de Trabajadores Penitenciarios Tu Abandono Me Puede Matar (TAMPM) han denunciado este viernes la agresión sufrida por dos funcionarios de la prisión de Sevilla I a manos de un interno. Los hechos tuvieron lugar en el departamento de aislamiento después de que uno de los internos más conflictivos del centro, que responde a las iniciales M.M.T. y con reiteras conductas de inadaptabilidad en las últimas semanas, hubiera amenazado con autolesionarse.

Según detallan los funcionarios, el interno había llamado por el interfono en reiteradas ocasiones a los funcionarios exigiendo bajar al patio a pesar de que no le correspondía. Al personarse en la celda, el recluso amenazó con cortarse el cuell o. Cuando los trabajadores entraron para proceder a retirarle cualquier objeto con el que pudiera hacerse daño, se abalanzó sobre ellos. «Un compañero acabó con lesiones en un brazo y está de baja médica y otro con magulladuras».

Desde la Sección sindical de Acaip resaltan la extraordinaria profesionalidad de los trabajadores al resolver un altercado regimental donde se habían expuesto a momentos de grave riesgo para lograr salvaguardar la integridad del interno agresor; mientrs que desde la Asociación Profesional de Trabajadores Penitenciarios Tu Abandono Me Puede Matar ponen el acento en que ese mismo interno ya mandó al hospital a otro funcionario en el mes de febrero, el cual sigue de baja. «En aquella ocasión las medidas regimentales no fueron mas allá de que el interno siguiese en el departamento de aislamiento. En esta ocasión tampoco se le ha aplicado medida alguna. Sevilla I no está preparado para internos con esta agresividad extrema. No dispone de los medios ni instalaciones adecuadas y ya se pidió en febrero el traslado de dicho interno a una prisión de máxima seguridad».

En esta línea, la asociación profesional sostiene que éste es un nuevo capítulo de lo que entienden que es un total abandono de la Administración a los funcionarios . «Una administración que niega sistemáticamente este clima de violencia en el que trabajamos, minusvalora el riesgo que corremos todos los días y se niega a facilitarnos los medios más básicos para el desarrollo de nuestro trabajo con un mínimo de seguridad ».