Se queda sin juzgar un intento de homicidio en Sevilla por la muerte del acusado

La Audiencia de Sevilla había fijado para este jueves un juicio por un intento de homicidio . La Fiscalía pedía para el acusado cinco años de cárcel. El juicio finalmente no se ha podido celebrar, pero lejos de fijar una nueva fecha, se ha suspendido de forma definitiva pues los funcionarios de la sección penal encargada de juzgar los hechos han tenido conocimiento de que el investigado ha fallecido .

A las diez de la mañana de este jueves estaba previsto que R.M.R. se personara con su defensa para el juicio señalado en la Sección Tercera de la Audiencia de Sevilla. Pero en el hall de la sala de vistas no han hecho acto de presencia ni el acusado, ni el abogado, ni el fiscal ni los magistrados. El juicio estaba suspendido, pero en esta ocasión no era por ninguna de las causas más habituales en estos últimos meses, como es el coronavirus . Fuentes judiciales han confirmado a este periódico que el acusado ha fallecido.

El 9 de mayo de 2017 , el acusado discutió, por causas que no han trascendido, con C.T.H., el hombre que posteriormente se convirtió en la víctima de la agresión. Un día después, a las diez de la noche, el investigado se volvió a encontrar con su víctima en un parque cercano junto al centro de salud de Pino Montano .

Según la Fiscalía, R.M.R., «con ánimo de acabar con su vida», atacó a C.T.H. con un palo en cuya punta había colocado una navaja , arma con la cual le asestó «un golpe en el pecho», así como otro en la región lumbar cuando el agredido habría caído ya al suelo.

Al mismo tiempo que le estaba pegando, el acusado no dejó de gritar: «te tengo que matar. Te juro por mis hijos que te voy a matar ». La víctima logró zafarse finalmente del ataque y consiguió huir del lugar de los hechos.

A cuenta de la agresión, C.T.H. necesitó asistencia médica de urgencia y un tratamiento quirúrgico con sutura de las heridas que sufría y la aplicación de grapas metálicas en las mismas. Así, la Fiscalía, en su escrito de acusación, achacaba a R..M.R. un presunto delito de homicidio en grado de tentativa , reclamando para él cinco años de cárcel y seis años de prohibición de acercarse o comunicarse con la víctima. Estos hechos quedarán sin ser juzgados por la muerte del único investigado.