Política
El PP nacional y el andaluz acercan posturas para consensuar una lista única en el congreso de Sevilla
Estaría presidida por la actual presidenta, Virgina Pérez, con su rival, Juan Ávila, como número dos
La opción de que el Partido Popular sevillano firme la paz antes de su congreso provincial toma forma. Las direcciones del PP nacional y el PP andaluz han avanzado en la opción de una lista única que integre a las dos candidaturas que se iban a enfrentar en el congreso del próximo día 27, comandadas respectivamente por la actual presidenta, Virgina Pérez —quien tiene el respaldo de Pablo Casado — y el alcalde de Carmona, Juan Ávila , apoyado por el PP andaluz de Juanma Moreno .
Tras dos semanas en las que la crispación interna había crecido notablemente, con cruces de denuncias incluidos, ambas partes preparan ahora un acuerdo que evite un conflicto similar al vivido hace cuatro años , cuando Virginia Pérez ganó el congreso provincial por estrecho margen tras una pugna que dejó al partido dividido. La lista de consenso que se está negociando estaría dirigida por Virginia Pérez, quien renovaría así como presidenta del partido en Sevilla , mientras que Juan Ávila sería el número dos. El resto de la directiva se repartiría al cincuenta por ciento entre ambos sectores.
El avance en la negociación, que se está llevando directamente desde los cuarteles generales de la calle Génova de Madrid y San Fernando de Sevilla, se produce después de que la dirección nacional del partido interviniera para frenar el intento del comité de garantías regional de impugnar la celebración del congreso . La estrategia pasaba por alegar que la convocatoria del mismo se había producido sin el quorum pertinente, al no alcanzarse los tres quintos de la junta directiva que imponen los estatutos, según la denuncia del sector de Juan Ávila. La paralización de esta impugnación parece marcar el punto de inflexión en el conflicto, que ahora parece derivar hacia un acuerdo que, no obstante, está aún por cerrar.
Cruce de acusaciones
El arreglo de la situación, de cualquier manera, no es sencillo. En los últimos días se han producido denuncias cruzadas de todo tipo entre ambos sectores que han elevado la tensión interna. La dirección nacional frenó el intento de la candidatura de Ávila de actualizar el pago de las cuotas de cientos de afiliados para que pudiesen votar a este candidato en el congreso. Igualmente, la corriente respaldada por el PP andaluz acusó a Virginia Pérez de impedir a los militantes que se pongan al día en el pago de sus cuotas para tener controlado el censo.
Este cruce de acusaciones motivó que varios militantes acudieran a los tribunales ordinarios para impugnar la celebración del congreso al considerar vulnerados sus derechos. Fuentes del partido señalaron ayer que el acuerdo definitivo debería inducir a la retirada de dichas denuncias, ya que de lo contrario un juez podría ordenar la suspensión del congreso al margen de un posible acuerdo entre las direcciones nacional y regional del partido.
Hasta el momento, la candidatura de Virgina Pérez parecía llevar ventaja en la carrera por el control del partido , ya que obtuvo una amplia ventaja en la presentación de avales. De esta forma, el Comité Organizador del Congreso reconoció 1.328 apoyos a la candidatura de Pérez frente a los 271 que se validaron de los presentados por Juan Ávila.
La convocatoria del congreso del PP de Sevilla ha puesto de manifiesto igualmente el pulso soterrado entre las direcciones nacional y regional para hacerse con el control del partido en las provincias.
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