El pirata informático que vendía una aplicación para robar las contraseñas de internet

Durante un ciberpatrullaje del Grupo de Delitos Tecnológicos de la Brigada Provincial de Sevilla, los agentes detectaron hace unos meses una web en la que se ofrecía una aplicación para poder hackear las contraseñas de usuarios de redes sociales, cuentas bancarias o de plataformas de ocio como Netflix. Una vuelta de tuerca al negocio de los piratas informáticos: vender herramientas a otros para que puedan acceder a información confidencial de terceros.

Detrás de esta web está un joven de 23 años, vecino de Almería , que fue apresado el pasado mes de enero. En estos momentos se encuentra en libertad con cargos . Su web sigue operativa, aunque con parte de la información mutilada. En ella aún se puede leer el método a seguir. Cuando el cliente adquiría el programa para piratear, tenía que enviar a la víctima un enlace a través del cual conseguía hacerse con la información. La Policía describe así el método: «clonaba una página web mandando un link a través de las redes sociales a las víctimas. Éstas accedían a la página pensando que eran la oficial introduciendo las credenciales de usuario y contraseña, así el ahora detenido mediante la ingeniería social se hacía con todos los datos». Clonaba webs de plataformas como Netflix, de organismos públicos o de redes sociales.

Según detalla la Policía Nacional en un comunicado, el investigado había conseguido las credenciales de casi dos millones de perfiles y disponía en sus páginas registrados más de quinientos mil usuarios que habían obtenido ese programa informático para robar datos personales . En el registro domiciliario los agentes se incautaron de un servidor, un ordenador portátil, un teléfono móvil, tarjetas bancarias y varios pendrive que se están analizando.

Además de la web, los agentes observaron que hay una aplicación en venta en un store que en los últimos meses estaba recibiendo muy malas críticas por parte de los clientes. Coincide que por esas fechas ya se había producido la detención y el desmantelamiento del negocio. A través de los comentarios de los usuarios se comprueba cómo eran conocedores de que estaban robando datos a terceras personas: «La verdad es que sólo la uso para diversión y no para cosas malas, sin embargo esto en manos de personas negativas es malo», señala uno de los comentarios . Muchos usuarios coinciden que meses atrás, cuando aún no se había producido la operación policial, la aplicación funcionaba correctamente y preguntan por alguna aplicación alternativa que les sirva para continuar accediendo a servicios a través de las credenciales de otros.

La crítica más habitual de estos usuarios es que tenían que soportar muchos anuncios durante el uso de la aplicación. Por eso, el pirata detenido llegó a ofrecer una versión premium que entre otras prestaciones ofrecía soporte técnico, la capacidad de generar más enlaces(links) con los que captar víctimas y menos publicidad.