Paseo en coche de caballos para el martes de Feria en esta residencia de Triana
Ataviados con flores, mantoncillo y castañuelas, han recorrido las calles del centro de la ciudad al ritmo de sevillanas
Esta jornada ha sido bastante diferente a lo que suele suceder en la residencia Nuestra Señora de la Consolación . Lo habitual había sido un paseo por el jardín o un refresco en la terraza del bar de la esquina. Después, de vuelta a la residencia para el almuerzo. Pero hoy era diferente. Muchas de las residentes en este centro de Triana han desayunado con la flor en el moño. Y en los corrillos del pasillo, sonaban sevillanas. Se nota que hay ganas de Feria.
«Porque estamos en la Feria de Sevilla y eso no se puede perder, con los dineros que mueve...» dice Rosario Herrera, de las usuarias que más ganas de fiesta tenía esta mañana. La primera al cante y la primera en animar al resto de compañero a disfrutar de este día tan importante para la residencia de la Consolación.
La Feria forma parte de una antigua tradición para los mayores de aquí, como explica Elisa, pues los lunes y martes de esta Fiesta Mayor de Sevilla solían ir al real invitados por la hermandad de San Gonzalo a su caseta . Y aunque este año no podrán pisar el albero, al menos, no se quedarán con ganas de pasear en coche de caballos.
Además, esta mañana de turismo en transporte equino es completamente gratis, ya que parte de una iniciativa de la patronal de cocheros. «La idea es promocionar el sector nuestro en plena pandemia y que ellos puedan pasear en coche de caballos el martes de Feria », explica Milagros López, propietaria de uno de los doce coches que han participado.
Sin duda alguna, este martes quedará para el recuerdo de estos residentes, que comienzan a volver a gozar de pequeños placeres y libertad, ahora que son inmunes al Covid . El paseo de hoy era el broche a una semana festiva y muy feriante en este centro geriátrico de Triana .
«Se lo merecen y lo están disfrutando como niños. Porque después de más de un año, hoy van a vivir una salida grupal en coche de caballos. Un homenaje bien merecido», explica Fernando Acosta, director de la residencia.
Pasadas las once de la mañana, como si de un desfile de gala se tratara, los carruajes recorrían las calles de Triana en dirección a la Plaza de España , al ritmo de palmas y unas sevillanas rasgadas en voces con mucha experiencia.
Noticias relacionadas