«Nuestra misión incluye dar la vida en Siria, sin límites»
La hermana Guadalupe, del Verbo Encarnado, lleva en Alepo desde el inicio del terror
![La hermana Guadalupe, en el Palacio Arzobispal](https://s2.abcstatics.com/media/sevilla/2015/12/17/s/religiosa-siria--620x349.jpg)
«En Siria hay una persecución terrible, sangrienta, atroz, contra los cristianos. Todos los días hay una masacre, es un genocidio, pero lo viven de manera admirable y no dudan en morir antes que convertirse al islamismo porque tienen los ojos puestos en la vida eterna, creen y esperan...» Son palabras de la hermana Guadalupe Rodrigo , que ha recalado en Sevilla para dar su testimonio en la presentación de la campaña de la fundación pontificia Ayuda a la Iglesia Necesitada.
Puede hablar de primera mano de apedreamientos, crucifixiones, muertes y miedo, a la vez que de soluciones y de política real esta religiosa argentina de la Congregación del Verbo Encarnado , en la que ingresó hace 23 años, 18 de los cuales ha permanecido en Medio Oriente.
En 2011, justo al comienzo del terrorismo del Estado Islámico , llegó a Alepo, en cuya Catedral, llamada del Niño Jesús, ofrece atención pastoral junto a otras dos hermanas, una peruana y otra egipcia; dos sacerdotes argentinos y el obispo, George Abou Khazen, de nacionalidad libanesa. Su instituto gestiona, además, una residencia para universitarias , que depende del Obispado, y ayudan a familias sin casa y casi sin esperanza.
Todo en una zona en la que el 15 de enero del pasado año cayeron tres misiles que mataron a 460 personas, una tragedia repetida de la que se salvaron milagrosamente, aunque una de las religiosas resultó herida por un hierro que le atravesó el pulmón.
«Nuestra misión incluye la posibilidad de dar la vida, claramente, sin límites». Es la convicción de la hermana Guadalupe. Por eso, como misioneras y siguiendo el carisma de su instituto —«Ir a los lugares a donde nadie quiere ir»—, las hermanas del Verbo Divino están en Siria, Israel, Gaza, Siberia... «lugares peligrosos y duros, a los que no llegan misioneros ni sacerdotes». «En Alepo, nosotros padecemos junto a los cristianos, que son mártires, acompañándolos, sosteniéndolos, consolándolos, y eso es un privilegio», continúa la hermana Guadalupe, a pesar de que «tenemos la guerra en plena ciudad».
«La desaparición del cristianismo en Oriente sería un suicidio para Occidente», afirma la religiosa
La guerra, el caos, la tragedia , la muerte están asentados en aquel país, en el que la vida de los cristianos es puro milagro, un destino que la hermana Guadalupe pidió expresamente y donde conoció una «buena convivencia entre musulmanes y cristianos —protegidos por un gobierno laico— y con cierta libertad religiosa. La relación, cosa rara, era pacífica. Había mucho bienestar, prosperidad e independencia económica».
Intereses económicos
Para la hermana Guadalupe es «impropio» hablar de guerra civil después de cinco años de conflicto y violencia, que «se provocó desde fuera, por grupos fundamentalistas extremistas, y ahí comenzó la persecución de los cristianos». En el trasfondo, «más que una religiosa están los intereses económicos, la venta de armas, el petróleo...» Sin pelos en la lengua, con conocimiento de causa, la hermana Guadalupe lanza la solución: «Es lo que propone la Iglesia, tanto el Papa Francisco como los obispos. Interrumpir la venta de armas y la financiación de los grupos terroristas , no comprar petróleo al Estado Islámico. Sería muy sencillo, se acabaría la guerra y de forma pacífica, por que la solución final no es reabrir las fronteras a los refugiados, eso son parcheados para reparar agujeros».
Pero —afirma—, «como no lo quieren hacer, la postura de la Iglesia no descarta una intervención militar con una coalición internacional. Es la defensa del pueblo que está siendo masacrado», como ha hecho Rusia con su intervención, «que, por primera vez en años ha hecho retroceder al Estado Islámico frente a otras acciones teatralizadas e ineficaces».
«Tenemos que rezar y confiar en el poder de la oración y de la difusión. Si el mundo levantara su voz..., pero no habla —se lamenta—, Occidente pasa de largo y lo cierto es que la desaparición del cristianismo en Oriente sería un suicidio para Occidente».
El instituto del Verbo Encarnado tiene dos perfiles en Facebook: SOS Cristianos en Siria y Amigos de Irak en los que seguir la realidad que viven.