Sanidad
Nochevieja 2019: las ocho mil llaves del Hospital Virgen del Rocío de Sevilla
Carmen Milla, jefa de celadores del mayor centro de salud de Andalucía, hará la ronda esta Nochevieja por todas las habitaciones y salas de la ciudad sanitaria sevillana
Carmen Milla , 51 años, es jefa de celadores del Hospital Virgen del Rocío y estará de guardia esta Nochevieja . Tiene formación en catástrofes (estuvo coordinando la atención a muchas personas que sufrieron la estampida de la Madrugada de la Semana Santa) y forma parte también del equipo de trasplantes, en el que cada segundo es precioso. «Intento que la gente a mi cargo tenga su servicio en Nochevieja de una forma más distendida pero es una noche en la que pueden pasar muchas cosas y tenemos que estar todos muy alertas», comenta a ABC.
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Ella se incorporará media hora antes de su turno este martes para que sus compañeros puedan salir también un poco antes y llegar a buena hora a su casa para preparar en familia la última cena de 2019. Carmen también repartirá dentro del hospital a todos sus compañeros bolsitas con tres o cuatro mantecados, mazapanes y aparte otra bolsita con las doce uvas . Esta noche habrá unos 26 ó 27 celadores trabajando en el hospital para afrontar cualquier incidencia que surja en los distintos edificios y lo que suceda en los distintos servicios de Urgencias, donde la Nochevieja del pasado año se recibieron a 581 personas con distintas patologías, según datos facilitados por el propio hospital.
A Carmen Milla le llaman «la carcelera» porque se ocupa, entre otras cosas, de las ocho mil llaves que hay en el hospital de todas sus habitaciones
En una de las salitas suelen poner sus compañeros una mesa larga y allí cenan todos los que pueden, a ratitos, según la actividad del hospital y las urgencias que puedan venir. No siempre pueden todos juntos. « El año pasado hubo muchas urgencias durante las horas previas a las campanadas y no pudimos cenar antes de tomarnos las uvas. Creo que terminamos hasta las doce menos diez», recuerda .
A Carmen le dicen de broma sus compañeros «la carcelera» , porque realiza un recorrido diario por el centro en el que debe abrir y cerrar puertas y encargarse de que todo esté listo para cualquier eventualidad. Cuidar de que no haya nada fuera de lo normal no es tarea fácil, aunque a alguien se lo pueda parecer. «Hay ocho mil puertas en el Virgen del Rocío y ocho mil llaves que las abren y las cierran» , cuenta para los no iniciados. Este centro es casi como una ciudad con distintos barrios en el que trabajan cada día más de ocho mil cuatro cientas personas. El Virgen del Rocío tiene 4 47 consultas médicas que atienden a más de 1.156.000 personas al año . También cuenta con 51 quirófanos, 4 paritorios y 1.200 camas.
La farmacia es una de las estancias que Carmen debe cerrar a las ocho de la tarde y abrir o cerrarla por la noche, si es necesario. «A veces he encerrado a alguien sin darme cuenta», bromea.
