LABOR SOCIAL
«Nadie me daba trabajo hablando como hablo»
Clece ha contratado en cuatro años a 1.504 personas en Sevilla, entre las que se encuentran víctimas de violencia de género, del terrorismo y discapatiados
![Genoveva Cristina Buza, Purificación Fernández Rodríguez, Daniela Macías y Alfonso Alzugaray de la Hera. Detrás están Gabriel Vázquez y Remedios Méndez, de Clece](https://s1.abcstatics.com/media/sevilla/2017/06/16/s/clece-sevilla-U1049269148290H--620x349@abc-Home.jpg)
Gana la empresa, gana la Administración, ganan las personas contratadas, y gana el usuario destinatario del servicio. Así resume Daniela Macías, delegada social de Clece en Andalucía, Extremadura, Ceuta y Melilla, los beneficios que tiene contratar a personas en riesgo de exclusión social, a discapacitados, a jóvenes que no encuentran trabajo, a esos colectivos sensibles que andan, errante.
Y Clece lo hace porque es capaz de ver lo que no ven otras empresas. Porque se fija en las capacidades no en las discapacidades y en esos talentos dormidos por las desgracias de la vida.
Alfonso Alzugaray sufre discapacidad física sobrevenida por mor de un accidente de moto que tuvo en México a donde se fue con 27 años (ahora tiene 31) para montar un negocio. Traumatismo craneoencefálico , varios días en coma y años de rehabilitación tiene en su haber Alfonso que antes había sido guía turístico y viajado por no pocos países de Europa. Ser bilingüe le ha valido para tener el puesto que hoy día ocupa en Clece, justamente en el Centro Especializado de Alto Rendimiento de Remo y Piragüismo donde trata con los equipos, hace nuevos socios, tareas de información y un sinfín de gestiones de responsabilidad. Después del accidente sus esfuerzos por encontrar trabajo fueron vanos. «He ido a otras entrevistas —dice— y, claro, yo entiendo a la persona que me recibe si tiene delante a un tío que lleva cuatro años parado y habla regular como hablo yo ».
Trabajo vocacional
En Clece las personas trabajan para las personas. Gestiona servicios de limpieza en hospitales, ayuda a domicilio, residencias de mayores, educativos, de empresas de mantenimiento, jardines y seguridad, entre otros muchos.
Está presente cada día en colegios, universidades, residencias, hospitales, aeropuertos, oficinas, teatros, centros comerciales.
Pero lo más llamativo es que emplea a personas en riesgo de exclusión social, bien porque tengan discapacidad, sean víctimas de violencia de género, del terrorismo, o parados de larga duración, por citar algunos de los supuestos.
Así, entre 2013 y 2016 ha contratado en Sevilla a un total de 1.504 personas de las que 56 son víctimas de violencia de género, 219 estaban en riesgo de exclusión por diferentes motivos, 21 discapacitados, 28 jóvenes parados, dos víctimas del terrorismo y 120 englobados en el apartado denominado «acción social».
![Genoveva Cristina Buza, recibiendo apoyo de Daniela Macías](https://s2.abcstatics.com/media/sevilla/2017/06/16/s/clece-sevilla-entrevista-U1049269148290H-U204288040317kbH-250x360@abc-Home.jpg)
Dice Daniela Macías que sin un trabajo nadie puede reinsertarse y eso es lo que «hacemos nosotros, ofrecerle esa oportunidad». Aclara que no son una ONG y que exigen a estas personas lo mismo que a cualquier otra que se gana un sueldo como trabajador . Ahora bien, «en igualdad de condiciones y ante la disyuntiva de contratar a una persona sin problemas y a otra en riesgo de exclusión, entra antes esta última».
Alfonso, Purificación y Cristina han vuelto a nacer con esta oportunidad que les ha dado Clece porque además «trabajamos en lo que nos gusta».
«Yo no sirvo —tercia Cristina— para estar en una oficina con papeles todo el día. A mí me gusta cuidar a las personas mayores porque son muy agradecidas y sensibles, y nos enseñan mucho ». Ellos tres también han enseñado con su relato a ABC que «se puede salir del agujero de la desgracia, perseverando y siendo positivos».
Para la responsable de Clece todas las empresas deberían tener en cuenta esta filosofía porque las personas que están cayendo por un pozo sin fondo son un plus añadido por el interés y el esmero que ponen en a la hora de realizar su tarea que les aparte de esa situación.
¿O es que Purificación, Cristina o Alfonso se van a arriesgar a perder su trabajo?