Madre de Dios celebra mañana la misa del aniversario de la muerte de Sor Bárbara, «la hija de la Giralda»

Será oficiada a las diez y media por el vicario general, Teodoro León, en el salón conventual que lleva el nombre de la sierva de Dios

Sor Adela ante la tumba de Sor Bárbara, en el coro JUAN FLORES

AURORA FLÓREZ

El convento dominico de Madre de Dios abre mañana sus puertas para celebrar la misa del 143 aniversario de la muerte de Sor Bárbara de Santo Domingo . La eucaristía será oficiada a las diez y media de la mañana por Teodoro León , vicario general de la Archidiócesis y deán de la Catedral, en el salón conventual que lleva el nombre de la sierva de Dios, al que los fieles accederán entrando por la puerta del torno de los dulces .

La memoria de Sor Bárbara, cuyos restos reposan en una tumba en el coro bajo , permanece muy viva en la comunidad dominica, formada por diez monjas, siete de ellas africanas, como sor Patricia, la actual priora, sucesora de sor Adela. Todas ellas mantienen viva la llama de Sor Bárbara, conocida como «la hija de la Giralda» por su nacimiento en una reducida estancia en la rampa número 30 de la Giralda. En aquel cuarto número 5, cerca al cuerpo de campanas de la que siempre consideró su torre, vivió la niña con su padre, el campanero Casimiro Jurado, y su madre, María Isabel Antúnez.

Muy joven sintió la llamada del Señor, un escalón en una vida caracterizada por la sencillez, la humildad y la austeridad que alimentaron su fama de virtudes en aquella comunidad asentada en la calle San José desde 1496, levantada a partir de las casas que la Reina Isabel la Católica otorgó a las religiosas.

Vivió la expulsión de su cenobio en la revolución «Goriosa» , que las llevó hasta el cistercenciese San Clemente, donde falleció en 1872. Su cuerpo, que permaneció incorrupto por ocho días , no regresó a Madre de Dios hasta 1877 en un traslado solemnísimo por calles engalanadas y rodeado de fervor popular.

A pesar de su corta vida, murió a los 30 años , tiene madera de sant a . Está inscrita en la misma hoja de tiempo que Santa Ángela de la Cruz y la Madre Sacramento , con quienes tuvo de mentor y guía en común al padre Torres Padilla , también con proceso de beatificación abierto.

Además de recordar a la sierva de Dios, todos aquellos que se acerquen al convento puden aprovechar para adquirir alguna de las exquisiteces de su obrador , que estos días trabaja a pleno rendimiento con la vista puesta en las Navidades, llenando de aromas la calle San José . Tienen para elegir entre magdalenas , perrunillas, bocaditos árabes, roscos de anís, tortas de aceite y para deleitarse con tres nuevos productos: los alfajores con o sin piñones , las delicias de nueces o los «suspiros de obispo» . Otra de sus especialidades es la «gallina en leche» , que las religiosas hacen por encargo.

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