Sevilla
La inspección detecta fallos de seguridad en el tobogán precintado en los jardines del Prado
El menor que cayó tiene ocho años pero la edad mínima para subir a la atracción es de doce

La inspección realizada por los bomberos de Sevilla a la atracción precintada en los jardines del Prado de San Sebastián, tras el accidente sufrido por un niño de ocho años, ha revelado fallos de seguridad, según han confirmado fuentes de la investigación a ABC.
En estos momentos se están tramitando dos expedientes. Cuando concluya la fase de investigación se entregarán al área de Medio Ambiente que tiene la capacidad sancionadora. El primero de esos expedientes se refiere a las deficiencias en materia de seguridad que los técnicos han detectado tras realizar una primera inspección al día siguiente de ocurrir el siniestro. El pequeño cayó desde la parte más alta de la estructura, de la que parte el tobogán de hielo . A pesar de que se precipitó desde una altura de varios metros, el menor no sufrió lesiones de gravedad . Fue evacuado a un centro hospitalario donde le realizaron un chequeo para descartar daños internos. En ese sentido, todo quedó en un susto.
Sin embargo lo ocurrido ha revelado al menos dos irregularidades en esta atracción que forma parte de «Sevilla on ice» , que se promociona como el mayor parque temático invernal de Europa. Sobre la falta de seguridad, los técnicos han observado que en la zona por donde se precipitó el menor no tenía elementos estructurales que impidieran una caída accidental . En la imagen que difundió el Ayuntamiento a través de su canal de emergencias se ve que la estructura estaba tapada con una lona blanca pero entre los barrotes se podía colar un niño como así ocurrió.
Además de esta deficiencia, los agentes comprobaron que la instalación tiene un límite de edad para los usuarios. La licencia municipa l se concedió como atracción para niños de a partir de doce años, pero el niño que sufrió la caída tiene ocho. Fuentes municipales han explicado a ABC que es obligación del empresario cumplir con los requisitos recogidos en el permiso que le habilita para montar la atracción. En este caso, no se habría verificado la edad del usuario, permitiendo que accediera alguien por debajo de la edad permitida.
La instalación se encuentra precintada y aunque se trate de una medida cautelar, todo apunta a que ya no reabrirá para estas navidades.
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