Universidad
La Hispalense zanja el caso de la profesora acusada de plagio apartándola año y medio
El Supremo hizo firme la condena a la docente, que impartía Historia y podrá volver a dar clase cuando pasen los 18 meses
La Universidad de Sevilla ha apartado de la docencia durante un año y medio a una profesora de Historia de América que fue acusada de plagio. La sanción, que se ha hecho firme hace poco más de un mes, llega tras un largo proceso de juicios, sentencias y recursos después de que se conociera que la docente, S.O. había sido acusada de plagio en varios de sus textos. Las acusaciones se produjeron porque había reproducido literalmente párrafos de documentos anteriormente sin el entrecomillado preceptivo.
Ahora, después del último recurso que la profesora presentó contra una sentencia anterior que ya la había condenado, el Tribunal Supremo dictó a finales de 2019 un nuevo fallo. En él se hacía firme la condena por plagio por tres artículos, condenándola a la suspensión de seis meses por cada uno de los artículos que supuestamente había plagiado. Se trata, en cualquier caso, de una condena menor que otra anterior que estimaba que debían ser tres años de suspensión (uno por cada supuesto plagio, en lugar de seis meses por cada uno).
Ha sido después de esa última resolución judicial cuando la profesora ha sido suspendida de sus clases que impartía en el departamento de Historia de América. Aunque las fuentes oficiales aseguran que la sanción a la profesora se ejecutó cuando la sentencia fue firme sin concretar la fecha exacta, otras fuentes universitarias afirman que la historiadora lleva apartada de la docencia desde el pasado mes de enero.
Esto supone que termina un largo proceso que se inició allá por el año 2004 cuando S. O. fue acusada por primera vez de plagiar en el trabajo de su tesis doctoral. Al parecer, cuando el texto fue publicado en una revista alemana llegaron varias denuncias a la Universidad de Sevilla procedentes de otros profesores argentinos, algunos de los cuales la acusaban de copiar sus textos.
Desprestigio
El Tribunal Superior de Justicia dictaminó en 2018 que se había producido el citado plagio y que no había ocurrido sólo una vez sino en tres ocasiones. «No ha sucedido solo en una obra sino en varias (las obras por las que fue sancionada antes, las obras por las que es sancionada ahora y las obras por las que no ha podido ser sancionada por haber prescrito la infracción)», dijeron los jueces, que calificaron su conducta de «grave» y que estimaron que lo ocurrido provocaba un «desprestigio a la universidad».
Entretanto el Rectorado, ahora inmerso en pleno proceso electoral ya que Miguel Ángel Castro se presenta a la reelección , ha puesto fin a un caso que se inició hace ya varios años. Sin embargo, otras fuentes de ese departamento de Historia de América han cuestionado la sanción recordando que la profesora volverá a la docencia una vez que termine esa suspensión y no ven de recibo que mantenga el doctorado que consiguió con una tesis plagiada.
«Hay precedentes similares en España de que en otros casos los Rectorados le han retirado el doctorado», han insistido. En medio de esta historia también se cuestionan las ayudas par la investigación que esta profesora recibió hace tiempo pese a estar inmersa en este proceso.
Noticias relacionadas