El Heraldo Real ha repartido magia de la víspera en Sevilla
Miles de personas han seguido el recorrido del cortejo, que se ha recogido en el Ateneo pasadas las ocho y media de la tarde
El Heraldo de los Reyes Magos , encargado de recoger las llaves de Sevilla , ha sido esta noche capaz de levantar emociones, palmas y sonrisas entre los miles de personas que esperaron su paso.
A lomos de «Soniquete», un magnífico caballo alazano, el Heraldo, encarnado por el periodista Mario Niebla del Toro , partió del Ateneo, en la calle Orfila, a las cinco y media de la tarde para protagonizar la víspera mágica encabezando un cortejo de cuatrocientas personas, doscientas de ellas beduinos que no han parado de lanzar caramelos. Él no se se ha quedado cortó. Con más entusiasmo aún que su cohorte el Heraldo ha arrojado puñados a destajo sin dejar que coger niños y alzarlos hasta su montura o pedir al público con las manos alzadas que corearan ¡que bote el Heraldo! ».
Vestido por los diseñadores Victorio y Lucchino , Mario Niebla del Toro asimiló a la perfección su papel de mensajero real. Sobresalía su imagen tocada con un impresionante turbante de tela turca antigua bordado en oro y enormes plumas naturales y una capa roja de tres metros con forro de oro. El cortejo, que abría y cerraba las agrupación musicales «Virgen de los Reyes» y «Nuestra Señora de la Victoria» de Arahal , respectivamente, ha amenizado todo el recorrido con villancicos y canciones.
El Heraldo, con sus dos pajes, Daniel Martínez de la Fuente y José Ortega Romero , pasó por la estrechez de Cuna, la amplitud de la plaza del Salvador, rodeó la plaza de San Francisco para dirigirse hacia la Catedral y regresar por la Avenida en su trabajo añadido de recoger las cartas de los niños , que se depositaron en el baldaquino , que ha continuado hasta bien pasadas las ocho y media de la tarde, cuando se volvió al Ateneo.
Ya se habían encendido las luces navideñas , cuando, a las siete de la tarde ha llegado al Arquillo del Ayuntamiento. Allí se ha producido la ceremonia de entrega de las llaves de la ciudad, que recibió el Heraldo de manos del alcalde, Juan Espadas , quien este día 5 de enero será el Rey Baltasar en la Cabalgata del Centenario, entre aplausos y cientos de flashes.
El Heraldo ha pronunciado unas palabras en las que pidió que « Exprimamos esta fiesta para ir a lo que realmente importa en la vida, que no es otra cosa que ser feliz y hacer feliz. Debemos hacernos la vida fácil entre todos. Miren en su interior y hallen las palabras amor, compañerismo, lealtad, comprensión ». Este es el mensaje que el Heraldo dejó para Sevilla y las órdenes «que río arriba he traído de parte de sus Majestades de Oriente».
