CRÓNICAS DE UN BARRIO
«En el gueto de Torreblanca trabaja más Cáritas que Asuntos Sociales»
El desempleo es el principal problema del barrio, que afecta al 60% de los jóvenes en edad de trabajar. Por esto, piden que se potencien las Escuelas Taller
Torreblanca tiene una frontera que nada tiene que ver con el territorio. Singularidades del azar quisieron que la línea divisoria del barrio fuera el Siglo XXI, que es el nombre que recibe el instituto público de la calle Torrelaguna. Precisamente esa linde, la del siglo Siglo XXI, es la que infunde desconfianza y temor al propio barrio pero también al resto de la ciudad. Cruzarla significa dar un paso atrás en el tiempo. A un lado Torreblanca, un barrio obrero donde vecinos y comerciantes quiebran sus mentes a diario para que la crisis les pase de soslayo; al otro, « Las casitas », una de las zonas más deprimidas de la capital en la que la pobreza cobra vida en cada esquina. Calificada por los propios residentes como gueto, cuyo centro neurálgico se encuentra en la plaza del Platanero .
Al ser cuestionado por el trabajo social desde las distintas Administraciones, José Baena , presidente de la Federación CAIS y de la asociación de vecinos y comerciantes Los Jardines, no titubea: «Hace tiempo que lo tienen como caso perdido. Asuntos Sociales hace muy poco allí. Trabajan más Cáritas y las Hermanas de la Cruz que la propia Junta o el Ayuntamiento. Pero si no actúan ya, irá a peor y el gueto será cada vez mayor».
La parte conocida como «Las casitas» fue una más del barrio en los años 60 y 70. El Ayuntamiento, entonces, entregó estas viviendas a familias con pocos recursos para que tuvieran un techo bajo el que guarecerse. Con el paso del tiempo, al mejorar su situación económica esas primeras familias, fueron abandonando el barrio y en su lugar entraron «las que el resto de Sevilla no quería: gente de las Tres Mil , el Vacie y Tres Barrios », apunta Baena. Así, las conductas que ya traían aprendidas de estas zonas, las implantaron en Torreblanca. «Lo peor es que hay familias que realmente necesitan ayuda y otras que desean salir de Las casitas, pero no tienen medios para hacerlo». La crisis económica , por otro lado, agravó la situación de éstas y de otras familias del resto de Torreblanca.
Calles accesibles para todos. Los vecinos reclaman que se adecente el acerado del barrio y un plan de accebilidad
Se acostumbraron a vivir, y muy bien, del sector de la construcción : la gallina de los huevos de oro que flaqueó cuando estalló la burbuja inmobiliaria. El desempleo , a partir de ese momento, se instaló para quedarse en más de la mitad de los hogares de Torreblanca. No sólo afectó a hombres de entre 40 y 50 años, también empezaron a padecerlo jóvenes que con 16 años salieron del instituto en busca de El Dorado. «Algunos ganaban hasta 3.000 euros al mes. Con esa cantidad, se aventuraron a comprar casas con hipotecas altas y a formar sus propias familias. Ahora son chavales de 25 a 30 años en paro desde hace años , con dos o tres niños a su cargo y sin tener otra formación que la que les dio el ladrillo».
En este sentido, Baena reclama tanto al Ayuntamiento con a la Junta de Andalucía planes de empleo de forma urgente. «Es necesario que refuercen la Escuela Taller y le den una formación alternativa a estos jóvenes. Reconvertirlos en cocineros, camareros, comerciales... Además de reforzar su cultura . La mayoría no saben resolver problemas matemáticos básicos ni expresarse, al desconocer el uso del lenguaje. Algo básico, por ejemplo, en una entrevista».
Cabe recordar que el paro en Torreblanca afecta al 50 por ciento de las personas mayores de 35 años en edad de trabajar, y al 60 por ciento, en el caso de los menores de esa edad.
La venta ambulante ilegal, según los comerciantes, está mermando la actividad de sus negocios. Exigen una mayor presencia policial que evite esta práctica
Por otro lado, desde la entidad vecinal solicitan una mayor presencia policial. Apuntan a que, recientemente, salieron a la luz datos de un incremento de robos en Torreblanca, cuestión que desmienten. «Desde la Policía Nacional, que está más presente en el barrio que la Local, nos han asegurado que el índice de robos a comercios o viviendas es el mismo que hace un año y que hace dos. Pero sí ha aumentado la percepción de inseguridad a causa de pequeños hurtos».
Respecto de esto, consideran que el proyecto de la Policía de Barrio sería el idóneo para barrios como Torreblanca. «Son necesarios esos agentes que conozcan a los vecinos, que hablen con los comerciantes, que sepan de los problemas del barrio . Así, en cuanto vean una cara que no es familiar, sepan cómo actuar».
Uno de esos problemas que existe ahora en Torreblanca y que está afectando seriamente a los comerciantes del barrio es la venta ambulante ilegal, que se produce, sobre todo, entre las calles Torremegía y Torrelaguna . «Los vendedores saben a qué hora pasa el coche de la Policía, una vez que no ven moros en la costa, colocan sus puestos delante de señores que pagan todos los meses impuestos. Y, encima, para los vendedores ilegales todo es ganancia....», afirma Baena.
Nuevos equipamientos
Desde esta asociación también denuncian la situación en la que se encuentran los colegios públicos del barrio. «Son muy antiguos, de infraestructura obsoleta. En estos colegios no se ha hecho una inversión de nuevas tecnologías como en otras zonas de Sevilla, ni cada niño dispone de una tablet. Está todo cogido con pinzas», aunque añade: «Pese a todo, hay que agradecer el esfuerzo y la implicación de los maestros de estos colegios. Por ellos, muchos de esos niños son hoy ingenieros, arquitectos o abogados».
Sin zonas verdes
José Baena bromea con el nombre de la asociación. «Nos pusimos Los Jardines de forma irónica porque lo que menos hay son zonas verdes». En este sentido, «presume» de ser el único sitio de Sevilla que no tiene problemas con la poda. « Si no tenemos árboles, no hay nada que podar . Los ejemplares que había no se han repuesto, tenemos muchísimos alcorques vacíos desde hace más de diez años». Por otro lado, asegura que el gobierno de Juan Espadas se ha comprometido a adecentar y vallar el parque de Torreblanca, sito en la calle Camino Cortijo Luis . Y recuerda: «La única que hizo algo parecido fue Soledad Becerril . Sin embargo, con el paso del tiempo, todo fue desapareciendo: vallas, la puerta de entrada... Y, desde entonces, nadie más ha hecho nada al respecto».
Por último, incide en la necesidad por un lado, de adecentar el acerado de las vías principales y realizar un plan de accesibilidad para las personas con movilidad reducida y, por otro, de incrementar la limpieza. «Desde la llegada del nuevo gobierno se ha notado un descenso de la limpieza , sobre todo del baldeo, tan necesario en este barrio», concluye.
