TRIBUNALES
Cuatro años y medio de cárcel para un trabajador del Circo del Sol por abusar sexualmente de una compañera
Coincidieron en una discoteca de Sevilla y ella presentaba «un estado de profunda embriaguez»
La Audiencia de Sevil l a ha condenado a cuatro años y medio de cárcel a J.V.T., un varón de 31 años de edad y origen boliviano, por abusar sexualmente de una compañera del Circo del Sol en el que ambos trabajaban, aunque «no tenían ningún tipo de amistad cercana». Coincidieron la noche del 5 de febrero de 2018 en una discoteca de la capital, donde ella se encontraba en « un estado profundo de embriaguez ».
La Sección Séptima de la Audiencia, en una sentencia facilitada por el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía a este periódico, señala que agresor y víctima coincidieron en una discoteca de la isla de la Cartuja en la madrugada del día 5 de febrero de hace dos años. Llegaron por separados con compañeros de trabajo del circo, cuando estaba presentando su espectáculo en la capital. Ambos no tenían ningún tipo de amistad cercana.
Ella estaba muy borracha. El acusado la llevó a su domicilio en Sevilla, en el que vivía con dos amigos. A la mañana siguiente, cuando ella se despertó se vio en la cama del varón, desnuda y de costado. Él estaba junto a ella. "Aturdida, desorientada y sin fuerzas para apartarse, le pidió al acusado que la dejara, que no siguiera ", según recoge la sentencia. Pero el varón hizo caso omiso y abuso de ella sexualmente hasta que la mujer pudo abandonar la cama.
Buscó sus ropas y pertenencias. El acusado le dejó su móvil para que se llamase porque no localizaba su teléfono . Se lo había dejado en el coche de un amigo la noche anterior, junto a su bolso. Entonces, el ahora condenado le dejó diez euros para que pudiera pedir un taxi para marcharse a su casa, también en la capital.
No hubo consentimiento
Cuando llegó a su piso se lo contó a sus amigas, que le insistieron para que fuera a un hospital para ser reconocida. Formalizó la denuncia ese mismo día ante la policía.
Para el tribunal, los hechos constituyen un delito de abuso sexual porque hubo penetración pero sin violencia ni intimidación, aunque tampoco consentimiento.
La versión de la víctima, al contrario que la ofrecida por el acusado, ha sido "uniforme, contando siempre lo que recordaba , sobre todo cuando se despertó desnuda junto al acusado". Lo que sucedió desde su llegada a la discoteca hasta la mañana siguiente no lo rememora.
Sobre la versión del condenado, los magistrados recogen en el fallo los cambios en el relato de J.V.T.. Ante la Policía no declaró, lo que sí hizo cuando pasó a disposición judicial. Delante del instructor negó las relaciones sexuales. En el juicio, en cambio, las admitió pero aseguró que fueron consentidas.
El tribunal, por estos hechos, lo condena a cuatro años y medio de cárcel y el pago de una indemnización a la víctima de 14.000 euros . Tampoco se podrá acercar o comunicar con ella durante seis años. El mismo periodo, tras salir de la cárcel, deberá estar sometido a libertad vigilada.
" Una noche de exceso de alcohol y de fiesta , en un ambiente relajado, pudo inducir a equívoco al acusado sobre el grado de intimidad al que la víctima quería llegar, aún cuando ya despierta, más consciente y sobria, rechazó tajantemente la relación, a lo que el varón no se avino. Por ello, debe imponerse la pena de cuatro años y seis meses", dice el tribunal.
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