Redes sociales
Así ha contado Alba Díaz, la hija de Vicky Martín Berrocal, su operación de reducción de pecho
La hija de la empresaria sevillana ha compartido en su Instagram el paso a paso de una intervención que cada vez es más común entre las mujeres
Las redes sociales son un escaparate para todo. De un tiempo a esta parte estas plataformas son un portal más donde las empresas, las marcas e incluso las personas utilizan como lugar de promoción, de llegar a más gente. De hecho, el fenómeno influencer está más que instaurado en el imaginario colectivo de todos los que utilizan las redes sociales, sobre todo desde el boom de Instagram. Muchas de las caras conocidas de nuestro país se sirven de esta red para estar más cerca de sus fans y no sólo contar su faceta profesional, sino también hacer llegar a todos la parte más íntima o personal de ellos mismos.
En esta línea, esta semana nos hemos topado en Instagram con unas publicaciones interesantes y que quizás no son tan comunes en esta red social. La hija de Vicky Martín Berrocal, Alba Díaz Martín, se ha sometido a una operación para reducirse el pecho y ha ido relatando el paso a paso en su historias. Destacamos este contenido porque no es tan común en una plataforma en la que prima el cuidado de la imagen y la perfección de los cuerpos dentro de unos cánones y se echan en falta, en ocasiones, experiencias como estas, en la que se pone en valor salud de las personas.
«Hace un año me di cuenta de que lo tenía que hacer sí o sí. No era una cuestión de estética, sino de salud . Durante este tiempo acudí a algunos médicos que me recomendaban y uno de ellos fue el Doctor Juan Peñas. Me la he hecho hace menos de 15 días y aunque he tenido dolor y tengo actualmente, estoy feliz por haber dado el paso», confiesa.
Tal y como cuenta en la red social, tenía una talla de pecho 120 y tras la operación se ha dejado una 85-90 y la operación duró unas tres horas: «No me enteré de nada», comenta. Con respecto al postoperatorio y el dolor explica que «depende del aguante que tenga cada una, no me está doliendo mucho, simplemente me molesta. Noto presión y pinchacitos. Un dolor nivel cuatro de diez y una presión e incomodidad siete sobre diez».
El tipo de cirugía a la que se ha sometido es de ’T invertida’ , que «es la única manera de reducir el pecho, quizás asusta de primeras pero cuidándolas bien con el tiempo -las cicatrices- ni se ven», asegura. Con respecto al estado del pecho, si lo tenía caído o no, Alba aclara lo siguiente: «El doctor utiliza una técnica de anclaje para que no se caigan al no poner una prótesis. Yo tenía material de sobra para reducir y colocar sin prótesis, pero cada una es un mundo».
Además de mostrar la naturalidad y entereza con la que se enfrentaba a la cirugía, tras la intervención Alba ha utilizando el sistema de preguntas y respuestas de esta red social : «Dudas que podáis tener sobre una reducción de pecho. Me imagino que muchas tenéis el mismo problema que tenía yo. Aquí os dejo una ronda de preguntas para comentaros, contamos qué tal me ha ido y si os puede ayudar en algo».
«¿Tenías mucho complejo de pecho grande?» , le preguntan, a lo que Alba responde: «He sabido llevarlo siempre, utilizaba prendas que me hacían sentir mejor. Pero llegó un punto en el que me limitaba y me hacía sentir incómoda. Los dolores de espalda aumentaban y operarme era una opción. Tarde o temprano tenía que hacerlo», explica.
«¿Afecta a la hora de dar el pecho en un futuro?», le cuestiona otra seguidora, «No, para nada, lo tienen todo en cuenta».
También anima a una de sus seguidoras que dice tener el mismo problema: « No tengas miedo, dicen que quien no arriesga no gana , cuando das con un equipo tan maravilloso que te da esa seguridad y tranquilidad el miedo desaparece. A mí me daba respeto, claro que sí, pero más ganas tenía de verme y estar bien».
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