HISTORIA DEL CLUB TRASTAMARA
Club Natación Sevilla se despide dejando un reguero de campeones de natación y halterofilia
La asociación deportiva se disuelve ahogada por las deudas y sin recursos para reformar un edificio con riesgo de colapso
El Club Natación Sevilla (CNS) colgó esta semana un crespón en sus instalaciones de la calle Trastamara 9 tras el anuncio de liquidación de la asociación, que este año cumple 85 años formando a deportistas de distintas disciplinas, desde la natación al ping pong, pasando por la halterofilia, waterpolo, gimnasia, boxeo, baloncesto, piragua, esgrima, patinaje o artes marciales. Luis Esquivias, presidente del club , ha luchado denodadamente por evitar su desaparición pero al final no ha tenido más remedio que tirar la toalla al acumular la entidad deudas por 1,4 millones de euros y no encontrar un inversor o una entidad que financiara la reforma del edificio, que cerró sus instalaciones en 2012 tras la caída del techo por daños en su estructura que amenazan con el colapso del inmueble.
Por el club Trastamara , como también se le conoce, han pasado nueve generaciones, de las que han salido campeones internacionales, nacionales y andaluces de varios deportes, entre ellos Paco Mateos, dos veces olímpico en halterofilia, o María Colomer, campeona de España y nadadora internacional en los años 90.
Germen de la entidad deportiva
¿Pero cuál fue el germen de este club? Luis Esquivias cuenta que se gestó en 1930, cuando algunos socios del Club Natación Barcelona establecidos en Sevilla se agruparon en torno a una alberca del barrio del Cerro del Águila. «Fruto de aquella excentricidad de esos deportistas nació el Club Natación Sevilla el 16 de junio de 1931», explica el presidente del club, quien destaca que ello coincidió con la inauguración de la piscina Playa en Los Remedios , donde comienzan a entrenar sus 200 socios hasta el año 1935, cuando se trasladó a la calle Trastamara, donde estaba la piscina que se había hecho para la Exposición del 29.
«La instalación era pequeña, ya que se trataba de una piscina al aire libre de 25 por 11,30 metros y una terraza solario, donde los socios montaron una canasta de baloncesto, un saco para hacer puños, una mesa de ping pong y varios aparatos gimnásticos», explica Luis Esquivias. A partir de entonces, la entidad quedó incardinada profundamente en la sociedad civil sevillana, convirtiéndose en referencia del deporte amateur andaluz. «Fue un laboratorio deportivo en aquella Sevilla de la posguerra», opina el actual presidente del club, quien recuerda la travesía del río Guadalquivir que anualmente organizaba esa entidad.
Hasta 1974 el club no disponía de piscina cubierta, lo que perjudicaba la preparación de los nadadores. «En 1974, en una empresa titánica, se logró cubrir la piscina, la primera instalación de este tipo en Andalucía, y reformar sus instalaciones», señala.
Natación
Desde el primer momento el club comenzó a acaparar premios. En 1933 se proclamó campeón andaluz de natación. «De este equipo surgen nadadores que se hacen notar en los rankings nacionales. Los años 40 y 50 fueron los de la consolidación del club en la élite nacional. En 1943 José Sánchez Parody conquistó el título de campeón de España absoluto de 200 metros braza». Tampoco olvida el presidente del club a « Vicente Abad, “recordman” y campeón de España en 100 metros braza , el primero de nuestro país en nadar en estilo mariposa. En las competiciones internacionales Francisco Blanco y Diego Galiano, junto a Abad, fueron los primeros andaluces que conquistaron entorchados. Ellos también formaron parte del equipo de waterpolo, el primero de Andalucía, alcanzando el subcampeonato de España».
«También tuvo un papel destacado Fernando Oliveras, campeón de España en 100 metros libre s, con un buen número de premios internacionales. Y así podríamos seguir mencionando los méritos de nadadores destacados de los 60 y 70, algunos —dice— campeones de España: F rancisco Martínez, Enrique Revuelta, Juan Luis Trillo, Javier Díaz, Javier Ojeda, Diego Rojas...».
El club también dio en los años 80 y 90 numerosos campeones de España, muchos de los cuales batieron récords nacionales, como Fernando Blanco, Jesús Lombilla y Fernando Martín Collo, Mario Cortés o Verónica Rodríguez . En los últimos años Marta Gómez Batelli y Casilda Lantero se alzaron con el campeonato español en 2012. «Marta fue olímpica en Londres 2012 y ganó dos medallas de bronce en los campeonatos de Europa de 2011», dice con orgullo Luis Esquivias.
Waterpolo
Si este club estuvo en la elite de la natación española, el waterpolo también le dio muchas satisfacciones. «De hecho, el actual Club Waterpolo Sevilla , que disputa la división nacional, nació del Club Natación Sevilla», subraya Esquivias. «El equipo de waterpollo del Club Natación Sevilla llegó a ser subcampeón de España en los años 50. Entre los años 80 y 85 no hubo waterpolo en el Club Natación Sevilla, que reinicia esa actividad en 1986 hasta el año 2000, cuando por falta de dinero se elimina esa sección. Los jugadores y el entonces entrenador, Peter Cutino , que fue internacional americano, fundamos el Club Waterpolo Sevilla. El presidente del club es hoy Cutino y el entrenador, Jesús Ordoñez , que también lo fue del Club Natación Sevilla», declara a ABC José Manuel Sánchez-Carrero, exwaterpolista del equipo del Club Natación Sevilla y que hoy, a sus 49 años, sigue en activo como portero titular en el Club Waterpolo Sevilla.
El baloncesto , el segundo deporte más arraigado en el club tras la natación, llegó a Trastamara en 1950. «Desde entonces el equipo ha sido un referente en el baloncesto sevillano». La gimnasia deportiva tuvo especial importancia en el club en los años 50 y 60. «Elvira y Fabiola Fiances fueron campeonas de España en categoría infantil».
Halterofilia
Y si la natación es la marca de identidad del Club Natación Sevilla (CNS), «la halterofilia también ocupa un lugar destacado en su palmarés, ya que su equipo fue nueve veces consecutivas campeón de la Copa España. José Gordillo, Enrique Plasensia, José Domínguez y Francisco Mateos fueron campeones numerosas veces a título individual. Mateos fue olímpico en Munich 72 y Montreal 76».
«El club no sólo generó deportistas de alta competición, sino que también prestó un importante servicio a los sevillanos al crear los cursillos de natación para niños. Famosa fue la frase acuñada por el inolvidable Lorenzo Muñoz: “Saber nadar es un placer, no saber nada es un peligro”. La mayoría de los sevillanos de más de 40 años aprendieron a nadar en la piscina de nuestro club», recuerda con nostalgia Esquivias.
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