Así se cambia una bombilla del puente de Triana

Cada vez que se funde una bombilla del puente de Triana , el Ayuntamiento tiene que montar un dispositivo mucho más complejo de lo que pueda imaginarse. Mantener iluminado el puente, algo que se realiza desde marzo de 1989 , tiene sus riesgos. El sistema de iluminación, compuesto por 64 focos, 48 de luz blanca y 16 de luz cálida, está incrustado en la propia estructura del puente.

Desde que se inauguró esta iluminación artística siendo alcalde Manuel del Valle y delegado de Urbanismo Isidoro Beneroso, poco más se ha vuelto a saber de ella. Sin embargo, ayer se formó un «revuelo» en la calle Betis cuando las personas que estaban en los veladores observaron que se habían colgado de la baranda dos personas. En principio, algunos pensaron que iban a hacer «puenting» , pero sus uniformes de trabajo, los cascos serigrafiados y la parafernalia para colocar las cuerdas y sus fijaciones indicaban que estaban allí para otra cosa.

Se trataba de dos empleados de la empresa TecniKa , especialista en trabajos verticales, a la que el Ayuntamiento tiene que recurrir cada vez que se funde una lámpara.