SUCESOS
La caída de El Pepín, rey de la heroína
Este jerezano afincado en Dos Hermanas volvió a ser detenido en julio por la Policía Nacional
Desarticulado un peligroso grupo de traficantes de heroína con base en Dos Hermanas. Así titulaba este periódico la información sobre la «Operación Jibia» el pasado mes de julio. El Cuerpo Nacional de Policía informaba de los resultados de un operativo que había atacado a una red muy activa de narcos con epicentro en la localidad nazarena. La investigación pudiera pasar como una más de las tantas que los grupos de la Udyco desarrollan en la provincia. Sin embargo, ésta tiene una importancia añadida, el nombre que se esconde detrás de las iniciales del supuesto cabecilla: J. S. H.
José S. H., de 66 años, casado y con cuatro hijos, es conocido en el mundillo como el Pepín , un jerezano afincado desde hace más de dos décadas en Dos Hermanas que se ha hecho un nombre en el mundo del tráfico de la heroína; tanto que no sólo es una referencia en el narcotráfico local. Cuando el grupo II de la Udyco de Sevilla comenzó a investigarlo en el mes de febrero, recabaron información entre los compañeros de las unidades centrales de Madrid. Sabían quién era.
Según fuentes policiales, «es uno de los grandes distribuidores de heroína a nivel andaluz con ramificaciones por toda España» y ha sido objetivo de investigaciones sobre narcotráfico a nivel nacional en más de una ocasión. No en vano ha sido detenido dos veces y tiene una condena por delito contra la salud pública ya en su haber.
En la «Operación Jibia», que ha llevado de nuevo a la cárcel a el Pepín, los investigadores relacionan la mercancía que controla este traficante de Dos Hermanas con envíos interceptados a su red de transportistas con destino al hipermercado de la droga de Madrid, en la Cañada Real . También se incautaron partidas (hasta sumar un total de nueve kilos) que presuntamente llevaban el sello del Pepín en Córdoba, Mérida y Toledo.
Desde la calle Manzanilla de Dos Hermanas , controlaba un negocio que se ha beneficiado del repunte del consumo de una sustancia que había tenido su etapa de esplendor entre los años 80 y 90. El Pepín, ya que tenía contactos directos con los proveedores de la mercancía, donde predominan las bandas del Este. José S. H. había tejido una red de comerciales que como los representantes de firmas comerciales iban por los hipermercados de la droga ofreciendo su mercancía. Muestra en mano, para que los jefes de las redes locales de venta pudieran testar una droga que salía manipulada de «la molienda» del vecino nazareno.
Este jerezano aceptó en 2009 nueve años de cárcel por su implicación en el mayor alijo de heroína incautado en Sevilla en 2006 (60 kilos). Desde hace poco más de un mes José S. H. está de nuevo entre rejas junto a uno de sus hijos, que también ha caído en la «Operación Jibia». Un control de carretera de la Policía Local en el que fue identificado junto a un conocido traficante de las 3.000 viviendas fue lo que levantó las sospechas. A los agentes les llamó la atención un bote de refresco que había sido manipulado para que pudiera guardar en el interior un paquete. Pesaba demasiado. El Pepín había regresado al negocio. Así comenzó la caza del rey de la heroína.