Sevilla
El Ayuntamiento reducirá los puestos del mercadillo de El Jueves en un 39%
El Gobierno municipal quiere que los vendedores demuestren además la procedencia de los objetos que venden para evitar la receptación
El Ayuntamiento de Sevilla ha comunicado a la Asociación Mercadillo Histórico Popular El Jueves que pretende reducir en enero los 178 puestos de venta actuales para dejarlos en 108, lo que supone una reducción del 39% del total. El Ayuntamiento ha pedido la colaboración de la asociación para llevar a cabo este proyecto, pero los vendedores anuncian que si el Ayuntamiento elimina los puestos sin negociar acudirá a los tribunales para pedir medidas cautelares.
En 2010, los comerciantes y el Ayuntamiento firmaron un convenio que cifraba en 124 los puestos autorizados de este mercadillo. El plan del Gobierno municipal pasa ahora por eliminar los puestos de una margen de la calle Feria (en la que está Casa Vizcaíno), todos los existentes en las plazas de los Maldonados y de Montesión, así como los de Conde de Torrejón, Cruz Verde las intersecciones de calles. El Ayuntamiento afirma, en primer lugar, que el convenio que se firmó con los vendedores no se está cumpliendo porque en lugar de 124 puestos, hay 178. Los comerciantes responden que esa ampliación de puestos fue autorizada por el Ayuntamiento hace varios años.
«El objetivo del plan es -a juicio del Ayuntamiento- es garantizar la continuidad del mercadillo del jueves siguiendo los planteamientos y el modelo definido en el convenio firmado. Se trata de evitar situaciones que han advertido los propios vecinos, como la venta de ropa usada o artículos de todo tipo de procedencia no controlada . El convenio y la propia tradición de El Jueves establece que se venden antigüedades y objetos en desuso o con un valor añadido por ser especiales. Eso es lo que se quiere respetar. Lo que se quiere evitar es que al lado de las antigüedades se venda ropa normal de segunda mano o artículos ordinarios domésticos que se pueden encontrar en otros mercadillos porque desvirtúa el El Jueves».
Asimismo, el Ayuntamiento declara que l os vecinos se quejan de la suciedad que dejan los vendedores cuando levantan los puestos, como ropa vieja y sucia, que después Lipassam tiene que recoger cuando no la han vendido en El Jueves y queda abandonada en la calle. También denuncian los vecinos que hay vendedores, sobre todo rumanos, que llegan de madrugada para coger sitio y terminan haciendo ruido y sus necesidades en mitad de la calle.
Reunión comerciantes-Ayuntamiento
Para abordar la reforma de El Jueves han vuelto a reunirse los comerciantes y el Ayuntamiento, representado por el delegado de Movilidad, Seguridad y Fiestas Mayores, Juan Carlos Cabrera ; la responsable municipal de Economía, Comercio y Relaciones Institucionales, Carmen Castreño, y el director del distrito Casco Antiguo, Luis Duarte. «El Ayuntamiento firmó en 2010 un acuerdo con los comerciantes que estipulada en 124 los puestos del mercadillo. Ahora quiere ir en contra de sus propios actos y dejarlos en 108, algo que prohíbe el Tribunal Supremo», denuncia León Artecho, asesor legal de la Asociación Mercadillo Histórico Popular El Jueves.
Artecho denuncia que «el asunto se ha abordado en una junta municipal del distrito Casco Antiguo sin darnos trámite de audiencia». En este sentido, Rosa Paz, presidenta de la Asociación Mercadillo Histórico Popular El Jueves , afirma que «Carmen Castreño nos ha dicho que el Ayuntamiento puede quitar los puestos si quiere, como hizo en el Charco de la Pava».
Los comerciantes ya han anunciado que si el Ayuntamiento «nos manda a la Policía Local a quitar los puestos sin argumentos legales y documentación sustentatoria, acudiremos a los tribunales para pedir medidas cautelares». «El Ayuntamiento no sólo quiere eliminar puestos en el mercadillo, sino también el espacio que ocupamos y que dejemos las aceras libres para que puedan pasar los transeúentes. Esto no tiene lógica porque todo el centro de la calle, por donde otros días circulan los coches, está libre el jueves para que las personas puedan pasar durante la celebración del mercadillo», explica Rosa Paz Caballero, presidenta de la asociación.
Acreditar el origen de la mercancía
En el acuerdo firmado hace ocho años por los vendedores y el Ayuntamiento, la Gerencia de Urbanismo reconocía el «marcado interés que el Mercadillo de El Jueves tiene para la ciudad de Sevilla, siendo en la actualidad un mercado de antigüedades y objetos de segunda mano, el cual se remonta en sus orígenes al siglo XII». Ahora, el Ayuntamiento pretende -según los comerciantes- cambiar el concepto del mercadillo para que no se vendan objetos de segunda mano y que los comerciantess acrediten la procedente de todos los objetos. Este anuncio ha terminado de poner en pie de guerra a los comerciantes.
«Nos pide ahora el Ayuntamiento que demostremos la procedencia de los objetos que vendemos porque quiere que sólo haya en el mercadillo "antigüedades y objetos raros". Nosotros le preguntamos a Castreño que quería decir por "objetos raros" y nos dijo que cosas que no se encuentran en otros sitios, lo cual no nos aclara mucho», explica la presidenta de la asociación.
Ropa y zapatos usados
La Asociación Mercadillo Histórico Popular lamenta que «ahora el Ayuntamiento quiera prohibir la venta de ropa o zapatos usados en El Jueves, algo que se hace, por ejemplo, en mercadillos con tanta solera como Portobello en Londres o El Rastro de Madrid» Urtecho se pregunta ahora «por qué Carmen Castreño quiere cambiar el objeto de un mercadillo que se viene celebrando desde hace ocho siglos y que en documentos de la Gerencia Municipal de Urbanismo se reconoce su larga y amplia trayectoria histórica a lo largo de siglos».
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