El ascensor en el que murió la recién parida de Valme es el más moderno y no es de acceso al público

El ascensor de Valme en el que el ayer domingo quedó atrapada una joven que acababa de dar a luz por cesárea es el más nuevo del hospital y no es de acceso al público sino interior, ya que comunica quirófanos, paritorios y zona de despertar.

Se trata del ascensor número tres dentro de los cuatro que funcionan en el centro hospitalarios. Los otros tres elevadores han sido revisados la pasada noche en busca de posibles incidencias. La empresa encargada del mantenimiento de estos ascensores, Orona, es tambien la encargada de la conservación de los de los Hospitales Virgen del Rocío y Macarena desde el 1 de septiembre de 2013, aunque en este último OTIS lleva el mantenimiento de alguno de los montacargas por un contrato existente previo.

Orona ha manifestado, en un comunicado, que «lamenta profundamente lo sucedido» y ha trasladado su «más sentido pésame y todo su apoyo a la familia y amigos de la fallecida», Rocío Cortés, una mujer de 25 años que acababa de dar a luz en el Hospital Valme.

La empresa ha indicado que las causas del siniestro «se esclarecerán en un informe técnico» que redactará «la autoridad competente de la Comunidad de Andalucía», con la que Orona «está colaborando». Además ha señalado que el elevador había pasado «sin incidencias» la última Inspección Periódica Obligatoria (IPO) en mayo de 2017 a través de un organismo de control autorizado independiente.

Fuentes del centro sanitario han dicho a ABC que el caso está judicializado y que no van a hacer daclaraciones respecto a este suceso, el cual no tiene precedentes en Sevilla.

Por otra parte, el celador que llevaba la camilla tuvo que ser sedado ayer tarde. Trabaja en el hospital desde 1968 y está a punto de jubilarse.