Antonia Gasch: «Mascarillas sí, guantes no, es simple»
La especialista en Medicina Preventiva y Salud Pública del Virgen del Rocío siempre ha incidido en lo poco conveniente de cubrirse las manos al salir a la calle, recomendación que ahora indica el Gobierno
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Antonia Gasch Illescas es médico especialista en Medicina Preventiva y Salud Pública del hospital Virgen del Rocío de Sevilla . Desde esta experta posición ha ido analizando las medidas aplicadas por le Gobierno durante toda la crisis sanitaria, en especial las que atañen a la protección del personal hospitalario, el más expuesto al coronavirus; y las que consiguen evitar una propagación mayor.
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De esta forma, en tiempos en los que las indicaciones respecto a la utilización de mascarillas han sido contradictorias, esta doctora siempre ha abogado por su uso sistemático. Ahora surge un nuevo debate centrado en los guantes. Su posición es igualmente clara al respecto.
El Ministerio de Sanidad terminó por recomendar no usar guantes por la «sensación de falsa seguridad». ¿Qué piensa?
Es el camino correcto, aunque llegue después de que diversos miembros del Gobierno hayan asistido a comparecencias en TV con guantes (sonríe).
¿Por qué no debemos usarlos al salir de casa?
Los guantes para la población general están desaconsejados. No debemos pensar que por llevarlos puestos de forma continuada estamos protegidos. Lejos de eso. Los guantes se contaminan de la misma forma que la piel de las manos. Y pueden seguir contaminando lo que toquemos sucesivamente, nuestros ojos, boca o nariz, u otras superficies que tocarán después otras personas…
A priori, lo que inspira un guante es servir de protección...
Pero en tareas concretas y específicas. En el ámbito sanitario, por ejemplo, están concebidos para no contaminar al paciente ni que este nos contamine. Pero tras ese contacto, se desechan. Un ejemplo muy claro se da en las cirugías de larga duración, en las que hay una necesaria renovación de guantes.
¿Es por su porosidad?
En efecto. Tras varias horas la flora de la piel del cirujano puede traspasar el guante, por ello no se pueden mantener y hay que renovarlos.
¿Es preferible entonces no llevar nada?
Es mucho más eficaz desinfectarnos las manos con frecuencia y cada vez que toquemos una superficie que pueda estar contaminada. En general, recomiendo que nos desinfectemos las manos antes y después de salir del establecimiento, bus o lugares compartidos, después de tocar superficies en lugares públicos, y justo antes de entrar en casa.
¿Y en el supermercado?
En este periodo de la pandemia es muy recomendable el uso de mascarilla para entrar en el super, o en cualquier establecimiento cerrado.
A menudo se obliga al cliente a ponerse guantes en la propia puerta del establecimiento...
Acéptalos, pero ten presente que todo lo que toques puede contaminar tus guantes y viceversa (tu bolso, tu bolsillo, etc.) y si te llevas las manos a la boca, nariz u ojos, te podrás contagiar también. En realidad, los guantes son realmente importantes antes de tocar alimentos no envasados (pan, frutas, verduras...) y debemos retirarlos cuando terminemos de elegir nuestros alimentos. Esta medida es útil para que, si tenemos nuestras manos contaminadas, no contaminemos lo que toquemos.
En realidad, sería volver a la lógica previa al coronavirus, la de no tocar directamente la fruta o el pan por higiene, ¿es así?
Exacto. En resumen, los ciudadanos deben usar guantes solo para el supermercado y establecimientos donde haya comida sin envasar, justo antes de tocarla, y deberán desecharlos después.
¿Qué podrían hacer los supermercados en vez de entregar guantes a cada cliente?
Lo ideal es que la barra del carro fuese desinfectada por algún empleado antes de que la tocase el cliente, y que el cliente se desinfecte las manos antes de entrar y al salir del supermercado.
A modo de conclusión, ¿cuál es para usted la mejor medida preventiva?
Además de la distancia social de dos metros, mi máxima es muy sencilla: «mascarillas sí, guantes no». Si se hace bien, el virus se mantiene a raya.