Pleno municipal

El alcalde de Sevilla elude hablar del acercamiento al País Vasco de los asesinos de Jiménez-Becerril y su mujer

La oposición interpela a Juan Espadas por «el deleznable pacto del PSOE con Bildu», pero éste se escuda en que el asunto «no está en el orden del día»

El alcalde de Sevilla, Juan Espadas, gesticulante durante el pleno de este jueves Vanessa Gómez

E. Barba

Pese a la insistencia de dos de los grupos de la oposición municipal, PP y Vox, el alcalde de Sevilla, el socialista Juan Espadas , ha evitado pronunciarse sobre las políticas con respecto a los presos de ETA de su partido en el Gobierno central y el acercamiento de esos presos a cárceles del País Vasco , en la misma línea que los principales cargos institucionales de su partido en España. No había preguntas previstas al respecto, pero esas dos formaciones han puesto el asunto sobre la mesa aprovechando sus intervenciones. Pese a referirse expresamente al asesinato en 1998 por parte de la banda terrorista del que fuera concejal en Sevilla Alberto Jiménez-Becerril y su esposa, Ascensión García, los dos partidos no han obtenido pronunciamiento alguno por parte del regidor, que ha rechazado opinar. Más silencio.

Al comienzo de la sesión plenaria de este jueves, la del mes de noviembre, la portavoz municipal de Vox, Cristina Peláez , ha solicitado al alcalde que se pronuncie sobre «el infame y deleznable pacto» del Gobierno central con EH Bildu para los PGE de 2021 , acuerdo que niegan los dirigentes socialistas del Ejecutivo. Peláez ha avisado en ese sentido de que «históricos socialistas como Felipe González y Alfonso Guerra», recientemente nombrado hijo predilecto de Sevilla, han «renegado» del citado «pacto» que niegan los dirigentes socialistas del actual Gobierno central. Por ello, la edil de Vox ha reclamado que Espadas «se pronuncie» sobre el asunto, muestre «cuál es la postura» del grupo municipal del PSOE hispalense y «condene ese pacto».

A esta argumentación se ha sumado el PP. El concejal Rafael Belmonte ha lamentado, de esta forma, que Espadas sea «reacio» a asumir las «cargas de su puesto» como primer edil, manifestando que como máximo representante de la ciudad debe defender «la dignidad» de la misma. Tal extremo le ha llevado a señalar el acercamiento de «los asesinos de Alberto Jiménez-Becerril y su mujer Ascensión García Ortiz» , en alusión a Mikel Azurmendi Peñagaricano y Maite Pedrosa Barrenechea, condenado el primero a 30 años de prisión como responsable del asesinato del matrimonio Jiménez-Becerril, entre otros asesinatos; y la segunda también por su participación en el crimen del concejal sevillano y su esposa. Por eso, ha pedido también que el alcalde «se pronuncie sobre el pacto» del Gobierno central del PSOE y Unidas Podemos «con los herederos de ETA», mencionando igualmente que «otros dirigentes del PSOE» en el ámbito nacional han criticado que el Ejecutivo central se apoye en EH Bildu para la aprobación de los PGE de 2021, en especial Alfonso Guerra tras su reciente designación como hijo predilecto de Sevilla. Así, ha considerado que Espadas «no debe permanecer callado, mudo y silente» ante dicho escenario, considerando que en tal caso carecería de «dignidad política» y se podría interpretar que «le parecerá hasta bien». «Ha manchado la dignidad de Sevilla», ha enfatizado Belmonte.

Una «burda maniobra»

Espadas, no obstante, no se ha querido pronunciar ni condenar el «pacto con Bildu» a nivel nacional, y se ha ceñido a lamentar que los dos partidos que han preguntado se hayan saltado el orden establecido. Se ha quejado el regidor, en este sentido, de estas manifestaciones, que ha considerado como «una burda maniobra orquestada por Vox y el PP» que «suponen una malversación fraudulenta del orden del día» al haber sido introducidas en un punto del pleno dedicado a un reconocimiento de crédito por una prestación de servicios, objeto respecto al cual las declaraciones de Vox y el PP, según ha indicado, no guardaban relación. «Que cada cual se retrate ante los ciudadanos», ha dicho lamentando el «catálogo de insultos» que, a su entender, ha recibido. Y nada más. Ni una sola palabra sobre los asesinos de Jiménez-Becerril y su esposa.

En la misma línea, la portavoz del grupo socialista, Adela Castaño , ha criticado que a Vox y el PP «les moleste que el Gobierno central busque consensos y diálogo» , considerando que sólo están «pendientes de la crispación y la polarización en la que quieren meter a toda la sociedad». «Ningún presidente ha llevado a más presos de ETA a las cárceles vascas que José María Aznar», ha aseverado, asegurando que frente a ello, los socialistas se centrarán en seguir gobernando.

Más allá de la posición del PSOE, el portavoz de Adelante (Podemos e IU), Daniel González Rojas , ha lamentado que Espadas, como presidente del pleno, «no haya llamado al orden del asunto» al dirigir Vox y PP sus discursos a un campo alejado del objeto del punto del orden del día. «No entiendo que se le dé un escaparate público a gente que falta al respeto a las víctimas del terrorismo», ha aseverado opinando incluso que a los dos partidos citados «les duele que ETA haya desaparecido» . «Dejar al fascismo un escaparate como este es un error garrafal», ha alertado.

El popular Belmonte, de su lado, ha negado que haya incurrido en cualquier «insulto», negando también cualquier «cariz fascista» en su discurso. Así, ha advertido de que la situación deriva de una «grave omisión» del alcalde respecto a sus obligaciones.

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