DIRECTOR GENERAL DE TRIBUTOS
Alberto García Valera: «Ahora nos molesta que nuestros amigos no paguen sus impuestos»
Este inspector de Hacienda constata un cambio de mentalidad de los ciudadanos tras la crisis económica
«¿Qué estamos fritos a impuestos? España tiene una presión fiscal del 38%, inferior a la media europea»
«Si a alguien le toca repetidamente la lotería lo investiga Prevención de Blanqueo de Capitales y la Agencia Tributaria»
![Alberto García Valera, nuevo director general de Tributos del Ministerio de Hacienda](https://s1.abcstatics.com/media/sevilla/2017/01/08/s/alberto-garcia-varela-kVOI--620x349@abc.jpg)
Desde el pasado 2 de diciembre, el inspector de Hacienda Alberto García Valera es el nuevo director general de Tributos del Ministerio de Hacienda. Durante los últimos cinco años estuvo al frente de la Agencia Tributaria de Andalucía, Ceuta y Melilla, desde la que ha combatido fuertemente el fraude fiscal. Nacido en Madrid hace 44 años, este experto en fiscalidad y comercio internacional llegó a Sevilla con 14 años, cuando su padre, ingeniero de caminos, fue desplazado a la ciudad para participar en el diseño y ejecución de la Expo 92. Desde entonces, su vida ha estado ligada a la capital andaluza, donde se casó con una sevillana. Su nuevo destino profesional le llevará a estar en Madrid de lunes a viernes, pero los fines de semana los pasará en Sevilla con su familia, especialmente en la Sierra Norte, donde a Alberto le gusta emplear su tiempo libre paracticando bicicleta de montaña. A partir de ahora, su nombre sonará y mucho, toda vez que este inspector será uno de los artífices del nuevo mapa de impuestos de España.
–Ha pasado de ser delegado de la Agencia Tributaria en Andalucía a director general de Tributos del Gobierno de Rajoy. Un ascenso que le permitirá seguir relacionado con los impuestos.
–Sí, he pasado de aplicar los impuestos que existen en nuestro país, desde el IRPF, el IVA o Sociedades, a participar en el diseño de nuestro sistema tributario. Entre mis competencias está el elaborar todas las normas de nuestro sistema tributario estatal y las pautas del sistema autonómico y local. Además, visitaré mucho Bruselas porque tenemos que armonizar el sistema de la UE existiendo futuras modificaciones importantes en el IVA como en el Impuesto de Sociedad.
—¿Cuántas veces le han preguntado que si quiere la factura con o sin IVA, sin saber que es inspector de Hacienda?
–(Risas). Me ha pasado, como a cualquier ciudadano pero lo importante es que todos seamos conscientes de la importancia de contribuir. Pagar nuestros impuestos es el mejor ejercicio de solidaridad que como españoles podemos tener con el resto de ciudadanos. No podemos querer tener los mejores colegios y la mejor sanidad si todos no contribuimos con nuestros impuestos. Además, tenemos que saber que sin ello no podemos ser un país en continuo avance.
–¿Cómo ha reaccionado cuando le ha pasado algo así? ¿Ha echado algún rapapolvo?
–Pues he actuado con absoluta naturalidad. Hay que informar a las empresas y autónomos de que tienen que pagar sus impuestos. Algún rapapolvo ha caído pero en general la gente reacciona con cierto nerviosismo y termina expidiéndote la factura correspondiente.
–Imagino que tendrá más de una y de dos anécdotas relacionadas con la falta de facturas por parte de empresarios.
–Sí. Alguna vez he salido con amigos a comer fuera y en pleno mes de agosto el restaurante nos ha dado la factura número dos, ¡la número dos a mitad de año!. Más de un amigo me pone sobre aviso de negocios que no cumplen con la obligación de pagar impuestos. Después de la crisis ha habido un cambio de mentalidad desde el punto de vista de la educación cívico–tributaria. Hemos pasado de que era gracioso no pagar impuestos, y no nos importaba que nuestro amigo no los pagara, a que nos moleste que nuestros amigos no cumplan sus obligaciones fiscales.
–La figura del inspector no es muy popular que digamos. Muchos ciudadanos se sienten «fritos» a impuestos.
–Para mí, ser inspector es un auténtico orgullo. Es una profesión enormemente compleja y técnica, a la que sólo se puede acceder tras demostrar una adecuada preparación. Como inspectores conocemos la actividad económica que desarrollan las empresas, al tiempo que aseguramos que todas ellas cumplan adecuadamente con la obligación de pagar sus tributos. En cuanto a que los españoles están «fritos» a impuestos, España tiene una presión fiscal del 38%, inferior a la media del resto de países europeos. Si nos comparamos con países que tienen un estado del bienestar similar al nuestro, no tenemos un exceso impositivo.
![García Valera nació en Madrid pero vive en Sevilla desde los 14 años](https://s2.abcstatics.com/media/sevilla/2017/01/08/s/entrevista-garcia-varela-kVOI--510x286@abc.jpg)
–Imagino que tendrá sus cuentas cuadradas hasta el último céntimo... No le vayan a coger en un renuncio.
–Uy, sí. Es más, como consecuencia de mi nombramiento como alto cargo de la Administración del Estado tengo la obligación de presentar en el portal de transparencia mis últimas declaraciones del IRPF y un certificado de estar al corriente con mis obligaciones. Cuando he tenido alguna multa he tratado de pagarla en el minuto uno para que se no se quede perdida por ahí.
–Algunos expertos cifran la economía sumergida en el 20% del PIB (en torno a 250.000 millones de euros). Sin embargo, hay analistas menos conservadores que la elevan hasta el 30%.
–Bueno, en el caso de España, las cifras del fraude fiscal no están cuantificadas porque el dinero «negro» lo es por esencia. Sin embargo, en los últimos informes de la UE en materia de «gap» del IVA (diferencia entre los impuestos que tendríamos que pagar y los que efectivamente hemos ingresado) vemos que está en torno al 8, inferior a la media europea y a grandes países del G5 de la UE. Por tanto, no estemos continuamente fustigándonos porque nos creemos ciudadanos menos cumplidores. Tenemos un sistema tributario razonablemente bien diseñado y en el que los niveles de cumplimiento están en la media europea. Lógicamente, el Ministerio y la Agencia Tributaria trata de luchar con sus profesionales contra el fraude de forma continuada.
–Ahora se ha celebrado el sorteo de El Niño. Casualmente hay gente que le toca varias veces la lotería. Cuando era delegado en Andalucía de la Agencia Tributaria conocí muchos casos de ese tipo?
–Sí, no son cientos de personas, pero casualmente hay mucha gente a la que le ha tocado la lotería más de dos veces. Hay gente que tiene un gran patrimonio sin tener rentas declaradas. En los supuestos en los que a una persona le toca repetidamente la lotería, lo investiga el Servicio Ejecutivo de Prevención de Blanqueo de Capitales (Sepblac) del Banco de España y remite la información a la Agencia Tributaria para determinar la posible existencia de ganancias no justificadas.
–En Sevilla, las principales calles comerciales están llenos de manteros que no pagan impuestos y que venden frente a tiendas que pagan sus impuestos. Una imagen que tampoco ayuda al turismo ¿No debería actuar con más contundencia la Policía Local?
–Bueno, no es mi competencia eso pero me consta que por mis contactos con la Policía Local hacen lo posible por actuar contra el mantero y atacar las organizaciones criminales, no sólo porque no cumplen la normativa tributaria, sino porque hacen competencia desleal al atentar contra la propiedad industrial porque usurpan marcas. Tanto la Policía como la Agencia Tributaria han desarrollado importantes operaciones en los últimos años para evitar que esa mercancía se comercie irregularmente. El mayor ejemplo fueron seis contenedores llenos de mercancía falsificada detectada en la Aduana.
–Arranca a andar en Sevilla la Zona Franca. Usted ha sido jefe de la Dependencia Regional de Aduana. ¿Se ha vendido bien este proyecto a la ciudadanía, que no sabe en qué le va a repercutir?
–El proyecto es fantástico para Sevilla. Los fabricantes que se establezcan en la Zona Franca pueden ahorrarse el coste financiero de todos los impuestos indirectos durante el proceso de fabricación: aranceles, IVA e impuestos especiales. Es decir, reciben un incentivo que no se traduce en subvenciones, sino en tener menos gastos. Una buena gestión de la Zona Franca debe ayudar a que multitud de empresarios puedan establecerse allí porque es bueno para Sevilla y Andalucía. La Zona Franca debe ayudarnos en términos de potenciación del Puerto y de la propia actividad industrial de Sevilla.
–Los ciudadanos pagan impuestos que llegan hasta el 45% y las grandes empresas sólo abonan un 6%. ¿No falla algo?
–La reforma fiscal llevada a cabo en 2014 procuró un rebaja de IRPF que permitió que las personas mileuristas no tuvieran que pagar impuestos, y en el ámbito de las sociedades se rebajó el tipo al 25% para ser más competitivo, manteniéndolo en el 30% para las entidades financieras, y eliminar deducciones para establecer que las empresas paguen un tipo medio más similar al que pagan la personas físicas. Pero no olvidemos que estamos en un contexto, el comunitario, en el que España tiene que ser competitiva, con lo que nuestro tipo de gravamen de las empresas tienen que ser similar al de países de nuestro entorno para no desincentivar las inversiones internacionales en nuestro país. No sólo hay que seguir con la reforma fiscal, sino que en el marco de la UE y la OCED debemos seguir con el proyecto BEPS para tratar de buscar una mayor armonización para que las grandes multinacionales tributen en los países donde obtienen sus ingresos de forma ordinaria. España ha traspuesto en su normativa parte de las recomendaciones de BEPS y existen directivas comunitarias próximamente.
![El nuevo director general de Tributos diseña los nuevos impuestos estatales](https://s2.abcstatics.com/media/sevilla/2017/01/08/s/entrevista-director-tributos-kVOI--510x286@abc.jpg)
–Se anuncia una subida del impuesto de sociedades para evitar una subida del IRPF. Sin embargo, corremos el riesgo de que finalmente las empresas compensen esa subida con aumento de precios o bajada de salarios.
–No tendría porqué. No ha habido un ajuste en el impuesto de sociedades en los últimos meses. Lo que se ha hecho es incrementar sus pagos a cuenta, que anticipen una mayor cantidad antes de la autoliquidación. Y se ha ajustado la tributación de los deterioros y de la venta de participadas cuando existan pérdidas
–En Andalucía, una de las comunidades con más paro y menos PIB per cápita, pagamos más impuestos que el resto de España en el tramo autonómico. Eso provoca que algunas empresas y directivos fijen sus sedes fiscales en Madrid ¿No genera ello un factor de desigualdad?
–Desde 2002 el sistema de financiación autonómica estableció las reglas del juego entre las diferentes comunidades autónomas, que permiten que éstas puedan subir o bajar determinados tramos de impuestos. Habrá que analizar, cuando proceda, si hay que rediseñar dicho sistema de financiación, la cesta de impuestos y los términos de corresponsabilidad fiscal entre las diferentes autonomía.
–¿Qué opina de las amnistías fiscales aprobadas por gobiernos del PSOE y del PP? ¿Por qué pagan los defraudadores un 3 o un 10% de lo defraudo si el resto pagamos más? ¿No es una forma de premiar el fraude?
–La declaración tributaria especial que se aprobó en 2012, en una situación excepcional para las arcas públicas, permitió aflorar un determinado patrimonio oculto que no sólo tributó entonces sino en los años siguientes. No olvidemos que eso vino acompañado de una declaración de bienes en el extranjero, que ha permitido aflorar 125.000 millones de euros de bienes de españoles fuera del país, que están tributando desde 2013. Siendo una medida excepcional, ha traído efectos muy positivos para el tesoro español.
–Tres exdirectores de la Agencia Tributaria creen que ésta necesita más independencia del poder político, medios y mejorar relación con el contribuyente.
–En cuanto a la independencia, respecto su opinión pero puedo asegurar que en todos los años que he ejercido responsabilidades dentro de la Agencia Tributaria nunca en mi vida he recibido ninguna instrucción de carácter político. Respecto a los medios humanos, la Agencia Tributaria tiene a los mejores profesionales, pero es verdad que un aumento de sus efectivos podría mejorar sus resultados. Por último, la relación con el contribuyente ha mejorado notablemente con la implantación de la cita previa, algo que está bien valorado en las encuestas que se han hecho entre los ciudadanos.
–La UE le ha dicho a España que tiene que reducir gastos en más de 5.000 millones. Hay quien plantea la modificación del artículo de la Constitución que nos obliga a la estabilidad presupuestaria
–Como ciudadano, mi impresión respecto a ese artículo es positivo y me da la tranquilidad de que nuestros gobernantes no nos llevarán a un situación de exceso de gastos sobre lo que ingresemos.
–Gibraltar es un paraíso fiscal para el reino de España, aunque está sometida a la normativa de la UE en intercambio de información. Gibraltar votó en contra del Brexit. ¿Le vendrá bien o mal el Brexit para seguir siendo paraíso fiscal?
–España ha denunciado el sistema tributario gibraltareño porque entendemos que atenta contra las reglas básicas de tributación, el código de conducto establecido por la UE. Seguiremos denunciándolo para que si quieren seguir siendo parte de la UE lo hagan cumpliendo las pautas europeas. Los ciudadanos gibraltareños votaron a favor de quedarse dentro de la UE. Es evidente que la salida de la UE de Gibraltar con Reino Unido le impedirá aprovechar sus políticas para su sistema financiero, asegurador o del juego, con lo cual las empresas de esos tres sectores y sus empleados se verían clarísimamente perjudicados con el Brexit. Gibraltar debería hacer una profunda reflexión en ese sentido.
–Los «papeles de Panamá» permitieron aflorar un fran fraude. Sin embargo, la percepción general es que finalmente se irán de rositas.
–Para tranquilidad de los ciudadanos, toda la información que ha llegado al Ministerio de Hacienda sobre personas o empresas con rentas no declaradas las estudia para que tributen finalmente por ello y paguen lo que tengan que pagar.
–¿Es útil publicar las listas de morosos?
–La dos publicaciones que ha habido hasta la fecha de personas que adeudan más de un millón de euros a la Administración han sido positivas porque las empresas que aparecen en las mismas han tratado de pagar esas deudas, aunque sea por un tema de reputación.
–¿Ha encontrado en esas listas a más de un amigo?
–Je je, no tengo ningún amigo que le deba a Hacienda más de un millón de euros.
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