VIOLENCIA MACHISTA
El acusado de asesinar a su exmujer en Palmete: «Yo no quería matarla, pero se me fue la cabeza»
El varón, que se enfrenta a una condena que podría ir desde los 26 años hasta los 46, asegura que «siempre lleva un cuchillo o una pistola»
«Yo no quería matar a mi mujer, pero se me fue la cabeza y perdí los nervios. Fue así y ya está». Así se ha expresado este martes F.R.T., el varón de 56 años acusado de acabar con la vida de que la fuera su mujer, de 41 años, y con la que tuvo tres niños . El menor, con unos seis años, fue testigo directo de cómo su padre mató a su madre en la tarde del 24 de junio de 2017 en un garaje de la calle Solidaridad de la barriada de Palmete de Sevilla , donde ella se refugió para evitar al agresor.
Momentos antes, el acusado hirió gravemente de una puñalada a una prima de la víctima , M.J.B.C. Después de matar a su expareja, de la que se había divorciado nueve años antes pero cuya relación volvió a retomar, huyó robando la bici a un niño . Horas más tarde se personó «voluntariamente» en la comisaría de la Policía Nacional en Nervión y confesó lo que había hecho: « Agente, vengo a entregarme, me he peleado con la parienta y le he pegado tres puñaladas ».
Por estos hechos, a los que hay que sumar el quebrantamiento de la orden de alejamiento que tenía de su exmujer, se enfrenta a una condena que podría oscilar entre los 26 años que pide su defensa a los 46 años que solicita la abogada de la víctima en este caso de violencia machista. El juicio con jurado en la Audiencia de Sevilla ha comenzado este martes.
El acusado, que ha respondido a todas las partes personadas en la causa, ha insistido una y otra vez en los problemas con la droga de su exmujer y de su prima , quien «le caía mal» porque fue «quien metió» a la víctima en este mundo, además de en el de «acostarse con enganchados, rumanos, negros, moros,...». Hasta el punto de acusar a la víctima de darle sustancias tóxicas a los hijos y maltratarlos. «Era la culpable de la situación», ha dicho en referencia a la prima herida, cuya animadversión ha quedado patente durante el interrogatorio.
En presencia de su hijo
El día de los hechos, según él mismo ha relatado, sabía que la víctima estaba en casa de su prima en la calle Soledad de Palmete porque se lo había contado una sobrina de ella, quien le indicó que ella estaba con un hombre tomando drogas y el niño menor de ambos llorando. Entonces, F.R.T., que «siempre lleva un cuchillo o una pistola » encima, se dirigió a la citada calle. Allí, agazapado detrás de una furgoneta estacionada, esperó durante dos horas que salieran de la vivienda.
Mientras, según siempre la declaración del acusado, escuchaba a su mujer con un hombre y a su hijo llorar porque lo iban a meter «en el cuarto de las cucarachas». De este domicilio salieron cuatro personas sobre las 18,15 horas. La víctima, su prima, la pareja de ésta y el niño de seis años.
Una vecina avisó a la prima, M.J.B.C., de la presencia del acusado. Entonces, ella se fue para el acusado gritando y éste « perdió el control y no sabía lo que hacía . Me volví loco y le di una puñalada», ha confesado el varón, que ha asegurado que no tenía intención de matarla: «Si hubiera querido, la hubiese matado. Me he tirado 20 años en la cárcel y sé cómo es eso». Además, a preguntas del abogado de la herida, ha contestado que si ésta no lo descubre y grita, «no hubiese pasado nada».
Entonces, su exmujer salió corriendo para huir de él. «Me volví loco y perdí el control» , ha insistido, intentando aclarar que «no quería matar a su mujer» , sino que iba a por el varón, que corría detrás de ella. A él no pudo darle alcance porque se asfixiaba. Mientras tanto, según el acusado, su expareja se refugió en un garaje cercano , donde había dos personas más, que «no hicieron nada».
F.R.T. entró dándole una patada a la puerta. Allí, con ella en el suelo, le asestó hasta doce puñaladas, según el escrito de la Fiscalía, y no más de tres, según el acusado. Todo ello con el hijo menor de los dos presenciando la escena, llorando y diciendo «mamá, mamá, mamá» . El padre ha negado que éste le pidiera que parase y que le diera un empujón a su hijo.
¿Robo o hurto de la bicicleta?
Mientras ella le reclamaba que la «perdonase», al tiempo que, según el acusado, intentaba defenderse. F.R.T. se ha levantado de la silla donde ha declarado este martes para gesticular cómo le asestó las puñaladas a su expareja . «Yo no pensaba matarla. Fue así y ya está. Si quisiera matarla, lo hubiese hecho hace tiempo . Maltrató a mis hijos y la dejé. Se me fue la cabeza», ha vuelto a decir. «Hizo cosas horribles».
Después huyó de la zona con la bicicleta de un niño de doce años. El acusado dice que el menor la abandonó en la calle al verlo ensangrentado y con el cuchillo, las acusaciones que se la robó con un empujón.
Unas dos horas más tarde, se personó en la comisaría de Nervión de la Policía Nacional y confesó lo que había hecho. « Si reconozco que he matado a mi mujer por qué no iba a reconocer el robo de la bici », ha apostillado. Ha concluido su declaración afirmando que no miente: «Estoy con Dios y digo la verdad, y si no, que me castigue».
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