Concierto de los Hermanos Domínguez con Jorge Cadaval

No podremos celebrar la primavera desde la Feria, pero sí disfrutar de la música y de una noche de pescaíto desde casa. Con este propósito comienzan los conciertos que durante toda la semana ofrecerán los Hermanos Domínguez a beneficio, además, del Banco de Alimentos y que se retransmitirán en la portada de la página web de ABC de Sevilla. Sevillanas y rumbas que se inauguran cargadas de humor en compañía de Jorge Cadaval, del dúo Los Morancos .

Quien ha seguido los pasos del cómico en la televisión, las redes sociales o en los teatros, sabe de su afición por el flamenco y de su capacidad para cantar y bailar entre risas y bromas. Algo que aprendió de forma natural en contacto con la gente de su barrio, Triana. El recital, de aproximadamente una hora de duración , tal vez sea una muestra de todo ello. Pues, como ha asegurado Casto Domínguez, uno de los componentes del grupo, será como «estar dentro de una caseta, pero cada uno desde su casa. Tenemos algo preparado y surgirán otras cosas sobre la marcha, es lo que tiene estar entre amigos».

Habituales de la fiesta en la ciudad , los Hermanos Domínguez, Pablo, Casto e Ignacio, no actuarán este año en la caseta del club Labradores, como tenían previsto, pero tampoco van a permanecer sentados frente a la televisión sin tocar una guitarra ni arrancar unas palmas que directamente nos evoquen a todos a la juerga del albero. Los días estiran sus minutos hasta caer tras el crepúsculo y ellos se niegan a dejar pasar por alto estas fechas tan señaladas donde habitualmente reina el rostro de la alegría. Son momentos difíciles, pero la promesa de evadirnos durante una hora se recibe con sumo agrado.

Si no les conocen, pueden escuchar su álbum homónimo, lleno de versiones, popurrís y aires folclóricos, para acercarse al universo de colores que nos plantean: Alejandro Sanz, «A mi aire», «My way», Niña Pastori . Lo que sea, pero que entre por el desfiladero de lo jocoso. Lo mejor, sin duda, será quedarnos con ellos en un directo en el que los acordes y la gracia son los verdaderos puntos de partida. Veámos, entonces, hacia dónde nos llevan.